En el país donde casi la mitad del trabajo es precario, los docentes no somos una excepción. Los políticos de los partidos tradicionales en campaña electoral se rasgan las vestiduras haciendo responsables a los docentes de la llamada "crisis educativa", opinan sobre calidad, inclusión, posible calificación de los educadores por parte de los alumnos y padres, igualdad de oportunidades, con total caradurez.
El gobierno nacional kirchnerista implementa planes educativos precarizados ,donde los docentes nunca saben cuándo ni cuánto van a cobrar. Esto nada tiene que ver con la inclusión. Por otro lado, la oposición derechista, que hace gala de un supuesto "pasado de gloria de la educación”, defiende un modelo elitista, meritocrático y, en última instancia, excluyente. El líder del Frente Renovador, Sergio Massa, apoya a Francisco De Narváez quien vocifera que en la docencia hay “ñoquis” tratando de desprestigiar a los docentes y hacerlos responsables de las falencias de la educación.
El presupuesto que el gobierno “nacional y popular” destinó para educación y cultura en Argentina durante el período 2005-2012, que incluye el financiamiento de la educación privada, se encuentra estancado en torno al 6% del PBI, mientras el grueso de la inversión consolidada nacional para educación y cultura sigue estando a cargo de las provincias (70%). Profundiza así aquello que dicen enfrentar: la política noventista de descentralizar financieramente la educación y de este modo agudizar las desigualdades. En los hechos, el Estado Nacional sólo se encarga del financiamiento de las Universidades Nacionales, el Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid) y algunos programas educativos precarios (Fines, becas, capacitaciones, infraestructura, netbooks, entre otros).
Pero la inestabilidad laboral de los trabajadores de la educación tiene distintas manifestaciones. No sólo es trabajo en negro ( Mejoras, Fines y Coas) sino que son cientos y cientos los docentes con cargos y horas que no cobran en tiempo y forma. Las últimas semanas centenares de maestros y profesores se encuentran con la enorme incógnita de cuándo les abonarán sus sueldos y nadie puede explicar porqué. No importa ya si son titulares, suplentes o provisionales, cuando van al cajero el quinto día hábil recién se enteran con qué cantidad de dinero contarán cada mes.
Por su parte, la conducción sindical de Suteba provincia, Roberto Baradel, nunca se preocupó por enfrentar la precarización. A este dirigente kirchnerista no le interesa cuestionar los planes de Cristina y Scioli para la educación pública, por eso no habla de nuestra situación. Como si no ocurriera nada.
La organización y lucha contra la precarización no es una pelea aislada, sino que se enmarcan en la lucha por la defensa de la educación pública que concierne al conjunto de los trabajadores de la educación.
Como parte de la conducción del SUTEBA La Matanza queremos organizarnos para defender la educación pública, acabar con el trabajo precarizado, creación de cargos titulares y provisionales para la educación de adultos y para todas las iniciativas tendientes a la inclusión educativa, cobrar en tiempo y forma. A igual trabajo, igual salario.
Los compañeros de la Lista Marrón en la Matanza, una de las seccionales combativas dirigidas por la Multicolor, pusimos en pie una comisión para que todos los compañeros cuenten con un respaldo a la hora de elevar sus reclamos, pero también con una nueva instancia de organización y lucha donde no haya docentes “de primera” y docentes “de segunda”. Todos juntos, desde los que ya se jubilan, hasta los que recién ingresan, tenemos que organizarnos y luchar por nuestros derechos. Esta pelea es parte de la defensa de la educación pública y del conjunto de sus trabajadores. |