El fantasma de las cuasimonedas en las provincias dejó de ser un espectro del pasado, encarnado el recuerdo de la crisis pos-2001, para transformarse en una alternativa, ante la paralización económica y la baja en la recaudación.

El gobernador, Omar Perotti, analizó ayer como una alternativa, la creación de cuasimonedas, ante la paralización económica y la baja en la recaudación, producto de las medidas tomadas por el coronavirus. El fantasma del 2001 ya no es solo un recuerdo. “Aquí hay una instancia de emisión monetaria que debe ayudar a las provincias, eso es lo que se está planteando”, sostuvo el mandatario santafesino. Y en ese sentido, agregó: “Cuando esa emisión monetaria no se puede garantizar, puede ocurrir lo que ocurrió en aquel momento (pos 2001) cuando se implementaron las cuasimonedas”.

Tres días después de obtener de la Legislatura la autorización para tomar deuda por 37mil millones de pesos, con el fin de reforzar la caja, y de otros 15 mil millones de pesos para atender la lucha contra el coronavirus, Perotti direccionó su pedido de plata al gobierno nacional. El gobernador advirtió que, como la caída no tiene piso, “no hay recursos para garantizar el pago de los sueldos” en la provincia. Por esta razón es que Omar Perotti considera como una alternativa la emisión de estos bonos del estado para cubrir los salarios de las y los trabajadores.

¿Pero es acaso este recurso el único posible? Un impuesto a las grandes fortunas seria una solución

El campo los últimos años aumentó sus ganancias en un 870%, mientras tanto, las grandes exportadoras han amasado una ganancia durante el año pasado por un total de 14.271,2 millones de dólares en la provincia de Santa Fe. Otros 32mil millones de pesos han ganado los bancos a nivel nacional tan solo en el mes de Enero. Esos mismos sectores que especulan con sus ganancias y permiten la fuga de dinero.

Resulta necesaria la nacionalización de la Banca y el Comercio Exterior que permitiría tener el dinero suficiente para afrontar esta crisis sin endeudar el futuro de millones, ni otorgar bonos públicos, con la incertidumbre que eso conlleva, en un contexto inflacionario, donde los grandes supermercados buscan sacar su tajada con aumentos desmedidos.