Este trabajo es realizado por los internos que participan en los Centros de Educación y Trabajo (CET), los cuales en base su experiencia en trabajos de costura y bajo indicaciones sanitarias han aplicado un protocolo de sanitización para la esterilización de los productos.
El trabajo consiste en la fabricación de dos tipos de mascarillas, unas son de material de tela no tejida de polipropileno (TNT), que se pueden utilizar hasta 3 veces siguiendo las indicaciones de lavado y planchado a vapor. Las otras se pueden utilizar hasta 100 veces, son de tela lavable, antifluidos y antibacterianas, estas están certificadas por el laboratorio Caltec Chile.
Esta iniciativa la están replicando los penales de Colina 2, San Felipe, Arica, Yungay y San Carlos, y próximamente se sumará Concepción y Mulchén. La meta es alcanzar las 50 mil mascarillas para entregar en las diversas penitenciarias.
La iniciativa, es sostenida por el trabajo de los internos, quienes tienen que soportar las paupérrimas condiciones en las que viven, siendo uno de los problemas más graves el hacinamiento, donde se exponencian las posibilidades de contagio.
Esto los reclusos lo han denunciado hasta el cansancio, en multiples comunicados y acciones para visibilizar el problema, incluso ofreciendo propuestas para descongestionar las cárceles, como arrestos domiciliarios momentáneos, facilidades para adultos mayores, etc.
Estos ejemplos no hacen más que demostrar el potencial de autoorganización que tienen los sectores oprimidos, al tener a disposición conocimientos sobre procedimientos necesarios para enfrentar la crisis. En este sentido es necesario remarcar que quienes están en estas cárceles en su mayoría han cometido delitos relacionados con la violación a la propiedad privada, mostrando uno de los problemas más contradictorios del capitalismo. La delincuencia, que muchas veces es una consecuencia a las condiciones precarias de vida, a esto se suma la impunidad de quienes orquestan robos millonarios desde las AFP´s por ejemplo y la de quienes residen en Punta Peuco, residiendo en cárceles de lujo luego de haber violado los Derechos Humanos de decenas de miles. | 
