“Soy una empleada de Mostaza de Los Hornos. Mis compañeros y yo estamos desocupados desde el 19 de marzo y hasta la fecha no hay novedad de nada, somos 30 trabajadores que dejaron abandonados en plena pandemia”. Así comienza el relato de la trabajadora de una de las cadenas de comidas rápidas más conocidas del país. Como ella, son miles los jóvenes que sufren las condiciones de precariedad laboral y abandono en medio de la cuarentena por parte de estas empresas multimillonarias.
“La empresa nos sacó el presentismo reduciéndonos a horas mínimas para pagarnos menos, todo esto en el medio del cierre. No se hacen cargo de nada y menos de darnos una respuesta. Y el sindicato de pasteleros no hace ni dice nada” cuenta a La Izquierda Diario con mucha angustia y bronca.
#MEstafa
Mostaza tiene más de 140 franquicias en el país y entre otras cosas fue sponsor de la Selección argentina de fútbol. Los últimos años se extendió a otros países de Latinoamérica. Como fiel representante del modelo McDonald’s y Burger King, paga salarios bajos, precariza y disponen del tiempo de vida de los laburantes a su gusto. Incluso en la llamada #McEstafa, las empresas recortaron salarios a todos los empleados.
En el caso de la sucursal de Los Hornos fueron más lejos: “en un mes nos pagaron $2.500, incumpliendo todas las normas e ignorando las necesidades que tenemos cada uno. Se están aprovechando de la pandemia. Para que ellos no pierdan sus ganancias a nosotros nos dejan en la calle con migajas” detalló.
Como vienen denunciando miles de jóvenes, la pandemia no hizo más que revelar que estas empresas son las verdaderas parásitas que lucran a costa de su vida, cuando todo va bien pagan miserias y cuando tienen que perder, descargan la crisis sobre el lomo de los trabajadores. “Nos sentimos usados abandonados y resignados…con $2.500 es imposible vivir un mes, tenemos muchas cosas que pagar y la mayoría tienen familias a su cargo, muchos alquilamos. Es muy angustiante nuestra situación estamos desamparados. Solo queremos una respuesta de todo lo que reclamamos”
En La Plata se empiezan a escuchar los reclamos de pibes y pibas que no se callan más ante los abusos patronales, ante esta crisis sanitaria y económica no quieren ser ellos los que paguen los costos, mientras las cadenas de comida rápida siguen amasando fortunas. |