Piñera agradeció a los empresarios y a Juan Sutil, presidente de la Confederación de la Producción y Comercio (CPC), en un lavado de cara a los empresarios, esos mismos que evaden impuestos con los aportes y los que se acogen a la Ley de “Protección al empleo” que les permite suspender los sueldo de miles de trabajadores en medio de una pandemia.
"Y quiero agradecer a Juan Sutil, a las empresas, a los empresarios, a todos aquellos que han permitido crear un fondo de más de 94 mil millones de pesos, para ir a ayudar, hasta ahora, a más de 300 mil familias vulnerables y vamos a llegar a más de 500 mil personas vulnerables. Ese es un gran aporte, y yo quisiera apreciarlo y reconocerlo" dijo Piñera, presidente de los empresarios.
La caridad de los empresarios de la CPC
Piñera alaba una donación de la confederación de Producción y Comercio que en una “increíble” hazaña, se juntaron para donar 94mil millones de pesos para ayuda. Resulta una cifra muy grandilocuente si se menciona así, sin embargo, si analizamos las riquezas de los grupos económicos que integran la CPC, la cifra donada resulta una miseria considerando las exorbitantes ganancias que cada uno recibe anualmente.
Dentro de los grupos económicos que integran la CPC se encuentran: la familia Luksic; Yarur y grupo BCI; grupo Matte; Agrosuper; grupo Saieh y Banco Itaú; grupo Consorcio; Angelini y Empresas Copec; Carozzi y Costa; Empresas Sutil y la familia Ibáñez. Dentro de estos se encuentran 6 de las 10 personas más ricas de Chile y que superan una fortuna individual de mil millones de dólares.
Si consideramos la fortuna sólo del grupo Luksic (la principal fortuna de Chile, 400% mayor a la fortuna de Donald Trump), la exhorbitante cifra asciende a 15.400 millones de dólares. La donación total de la CPC, los 94 mil millones de pesos representan sólo el 0.7% de la fortuna de un solo grupo económico, una verdadera miseria para enfrentar al coronavirus.
Toda su caridad no es más que una lavado de cara para los empresarios que nos explotan a diario, que se coluden para subirnos los precios, que se acogen a la ley de “protección al empleo” para suspender los sueldos, que posan de buenos en la Teletón haciendo donaciones con las cuales evaden impuestos. Si sólo tomamos el 20% de la riqueza de las 10 familias más ricas de Chile podríamos construir 40 hospitales para enfrentar la pandemia. Ya sabemos: la verdadera pandemia son los empresarios.
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