"Trabajo en el Hospital Sótero del Río hace ya 12 años, he visto muchos altos y bajos, siempre he amado mi trabajo, sin embargo, lo que vivimos ahora ha sido lo peor, porque la escasez de un insumo u otro siempre ha existido, y uno se las ingenia, sin embargo, la racionalización de los EPP (Equipos de Protección Personal) ha sido indigno:
Mi servicio es el último en la línea que tenía contemplado atender pacientes covid (+) ya que tenemos transplantes renales y oncológicos agudos (ambos muy inmunosuprimidos). Igualmente hemos tenido siempre pacientes con otros tipos de aislamientos principalmente contacto por microorganismos intrahospitalarios multiresistentes que por norma lo requieren, y aquí es donde nos quitaron las pecheras plásticas y nos empezaron a dar UNA PECHERA DE GENERO POR PCTE PARA 24 HRS (turno que hace todo el personal de salud sin excepción, ya que todo se modificó para "disminuir" riesgos de contagio).
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Esa sola pechera impedía que el paciente fuese atendido a la vez por más de un funcionario, y los técnicos cuando deben bañar a estos usuarios terminaban con la pechera mojada y por ende sus uniformes debajo también, se nos entrego "rollos de manga plastica de ecógrafo" sin esterilizar para que se auto fabricará mangas plásticas, finalmente muchos tens optaron por fabricarse pecheras con bolsas de basura para bañar los pacientes, y encima de esa se ponen la de genero. Otros han optado, tanto técnicos como profesionales, en comprar cada uno sus EPP, las viceras amarillas las hemos comprado (solo el gremio de las enfermeras le "regalo" a sus socias), otros hemos comprado nuestras propias pecheras e incluso mascarillas.
Luego fui testigo como las enfermeras supervisoras del área adulto fueron a "requisar" todas las mascarillas N95 de los servicios que tenían (mi servicio tenía ya que se programan porque tenemos aislamientos para pctes TBC).
Los kinesiólogos que son los más expuestos deben prolongar el uso de la N95 ojalá más de un turno de 24 hrs, se entrega un buzo completo desechable para las 24 hrs y el cubrecalzado es hasta que se rompa, no tienen residencias separadas, lo que también generó un brote, y gran parte de su equipo se ha ido.
Esta última semana el servicio ya no tenía guantes de procedimiento, y teníamos autorización de la dirección para usar los guantes estériles (mucho más costosos)
Finalmente esta última semana hay brotes de covid ya prácticamente en todos los servicios, han ido cayendo como "pollos" ni a los antiguos ni a los nuevos se nos ha capacitado efectivamente sobre la colocación y retiro de EPP, todo tiene una técnica, iban cambiando el "orden" cada semana o mes según los estudios, lo que ha creado confusión y error, se han diagnosticado mal los pacientes lo que ha llevado a estos brotes en más pacientes y en el personal, y por ende al colapso del CAIF (centro atención integral funcionario) que desde 1/05 comenzó a atender de lunes a lunes, y en la ACHS hay más de 8 hrs de espera para tomarse la PCR SARS COV2.
La UCI tiene 18 camas con pacientes todos ventilados por covid, recién estos días se han podido ir reconvirtiendo camas UTI a UCI, porque hay falta de enfermeras y tens capacitados, y así poder tener más ventilados, los que llegaban días previos se mantenían en reanimación (urgencia) en espera de conseguir una cama uci en el extra sistema.
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Esto es un estrés constante, en lo personal estoy viviendo una situación particular derivada de haber entregado a mi única hija a su papá (estamos separados) por un acuerdo de palabra ante el miedo de contagio, ya a casi los 2 meses de ello estoy con síntomas depresivos y he somatizado físicamente en forma importante, lo que me tiene desde un par de días con licencia médica. Me hice por mi parte el examen del covid ante la ansiedad, y aún espero el resultado.
Saludos y gracias por esta instancia que sirve un tanto de desahogo."
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