Luis Giordano
| Trabajador y congresal del Sindicato de Obreros Jaboneros del Oeste
Desde que comenzó la pandemia, la ex Jabón Federal triplicó su producción y contrató a más de 50 trabajadores por agencia en el último mes. Estaría en condiciones de efectivizarlos a todos, ¿por qué no lo hacen?
Con el coronavirus hay empresas que sacan provecho y se están haciendo millonarios. Entre ellas, están las de productos esenciales como el jabón para lavarse las manos.
Alicorp es una de estas empresas: es una multinacional latinoamericana que llegó a la Argentina en el 2009 para quedarse con las marcas Plusbelle, Limol y Zorro, entre otras. Para esta empresa, al igual que P&G, Guma, Unilever o Querubín, la llegada del coronavirus es una gran oportunidad para hacer negocios como nunca antes. Para esto, uno de sus métodos preferidos es flexibilizar las condiciones de trabajo de sus empleados e incorporar personal contratado por agencia.
Mientras al personal estable le demandan horas extras a diario y el desarrollo de sus tareas en otros puestos o sectores que no son los habituales (polifuncionalidad), la empresa recurrió a tomar una importante cantidad de compañeros por agencias de empleo temporal: cerca de 50 trabajadores, en su mayoría jóvenes, ingresaron en los últimos 40 días en Alicorp, Guma y en otras empresas que producen jabón, artículos de higiene y limpieza.
Gobierno tras gobierno, los jóvenes son explotados desde pibes y descartados a temprana edad. Ahora, con ellos pusieron en marcha máquinas que estaban paradas hace tiempo, casi obsoletas, para abastecer la nueva super demanda del mercado. Allí mismo en donde se hacen las tareas más pesadas, exigentes y repetitivas y en dónde más cantidad de personas se tienen que amontonar por máquina, a los codazos, para poder trabajar.
Como es sabido, sus contratos son indeterminados en el tiempo. Es decir que pueden concluir a los 3 meses, a los 6 meses o en una semana. Ninguno lo sabe. Lo que sí es seguro es que, cuando llegue la ocasión, no serán indemnizados. En varias ocasiones, los adicionales que cobran los efectivos no los perciben ellos. Por ejemplo, el bono por trabajar en cuarentena: en Alicorp solo fue otorgado al plantel efectivo haciendo de esta manera una discriminación tajante e ilegal al violar la ley de igual trabajo, igual remuneración.
¿Cómo lograr la efectivización de todos los contratados?
Desde la agrupación Bordó en el gremio jabonero siempre peleamos por la unidad e igualdad de derechos entre efectivos y contratados en las fábricas dónde estamos. Y creemos que éste es el momento de lograr la efectivización de todos ellos. El coronavirus no es temporario y llegó para quedarse. Con él también se quedarán las nuevas prácticas de cuidado como el uso del barbijo y, sobre todo, el lavado frecuente de manos. Por lo tanto, no pueden decir que el récord de demanda de producción actual sea algo excepcional. Hasta la misma empresa reconoce que ha triplicado la producción en el último mes.
Los que formamos parte de la agrupación Bordó en Alicorp ya hemos demostrado cómo lograr las efectivizaciones de los contratados. En el 2010 y 2013, cuando éramos parte de la Comisión Interna, luchamos y logramos la efectivización de 70 compañeros primero y luego 30 de ellos después.
Mediante asambleas democráticas, trabajo a reglamento, cortes de calles y avenidas, logramos hacer fuerte y público el reclamo logrando con esos triunfos nuevas fuentes de trabajos de compañeros que aún continúan allí al día de hoy.
La actual Comisión Interna que responde a la agrupación Verde del gremio jabonero que está enrolado en la CGT, hace días sacó un tímido papel en donde, entre otros reclamos, cuenta que le pide a la empresa la efectivización de los contratados en los puestos vacantes. Sin embargo, no están haciendo nada para lograrlo. Solo reuniones con la empresa de las cuales nadie sabe qué es lo que pasa.
Es necesario que ya mismo llamen a asambleas en donde todos los trabajadores, tanto efectivos como contratados, podamos debatir un plan de lucha para lograrlo.
Tenemos que reclamar la efectivización de todos, no solo los que la empresa tenga ganas. Su trabajo es tan esencial como el de los efectivos.
Esta empresa se da el cínico lujo de obligar a los trabajadores a sacarles fotos con un cartel con la frase “Nuestro récord salva vidas”. Las únicas vidas que se salvarán serán las de los CEOS de sus empresas. Nosotros vemos cómo nuestros amigos, hermanos y vecinos se hunden en la pobreza. Porque para ellos, no solo la vida y la salud, sino los jabones, son inalcanzables por el aumento del precio de esos productos. Para estos sectores humildes debería ser gratuito el acceso a estos productos esenciales.
Mientras en las fábricas los empresarios se hacen cada vez más ricos, los trabajadores solo tenemos la oportunidad de sacar unos mangos más solamente si trabajamos 12 horas al día, incluyendo domingos y feriados. Con la excusa de la pandemia, de paritarias ni se habla. Como si nuestro sueldo alcanzara para lo mismo que antes y como si sus ganancias fueran las mismas de siempre. Durante la cuarentena, cada día de trabajo salimos de la fábrica destruidos y solo con ganas de descansar. En casa nos esperan nuestras familias, hartos del encierro, con más y nuevas tareas como las del colegio. Tareas que también a veces nosotros tenemos que ayudar desde el trabajo.
Con la efectivización de todos los contratados se podría abrir nuevos turnos y nuevos puestos para lograr que trabaje más gente y menos tiempo para que estemos expuestos a tener que salir de nuestras casas. Esto también permitiría mayor distancia social entre cada compañero y al mismo tiempo podríamos contar con un salario que cubra todas nuestras necesidades y que no sea como las horas extras que son pan para hoy y hambre para mañana.
Solo recuperando la unidad entre efectivos y contratados, retomando las asambleas democráticas de base, votando un plan de lucha y con los delegados y el sindicato a la cabeza, podremos lograr estos objetivos. Es necesario que conformemos comités obreros de seguridad por sector y línea de producción, con compañeros elegidos por asambleas que tengan la protestad y mandato de decidir cuando haya que parar alguna máquina o sección por no cumplir los recaudos de higiene para evitar el contagio. Tenemos que exigir que las patronales paguen el costo para que se nos realicen test de COVID 19 a todos los trabajadores que estamos en actividad y también nos tienen que garantizar el transporte de los trabajadores efectivos y contratados en todos los turnos. Solo así podremos saber si contraemos el virus y podamos evitar el contagio y su propagación, independientemente de tener síntomas.