Ya habíamos informado que unas 20 mujeres trabajadoras se encontraban sin seguro de paro, por haberse terminado la posibilidad de prórroga de los mismos. Pero tampoco podían cobrar su salario porque la patronal cerró la fábrica por la emergencia sanitaria y mandó a todo el personal a su casa.
Esta multinacional, tal como denunciaron sus trabajadores, dejó sin salario y sin seguro a mujeres que son jefas de hogar, en plena pandemia.
Gracias a la lucha del Comité de Base, que se plantó para defender a esas 20 compañeras, en la última reunión tripartita se logró que el Ministerio de Trabajo (MTSS) determinara un seguro especial para las compañeras, que se cobrará retroactivo al momento en que la empresa las dejara sin su salario.
También lograron el compromiso de que, para los próximos compañeros que se queden sin seguro, poder acceder a este seguro especial. Esto sienta un precedente importante para todo el sector.
Al decir de Martín, integrante del Comité de Base de la UNTMRA, “para nosotros es un éxito porque, si bien no fueron amparadas en su momento, van a percibir los jornales caídos, y eso está buenísimo”.
Yazaki es tristemente conocida por importarle poco la vida de sus empleadas y empleados, tal como se ve en los ritmos extenuantes y los movimientos repetitivos que impone en sus dos plantas de Las Piedras y Colonia, lo que lleva a la aparición de múltiples enfermedades laborales. Muchas de ellas irreversibles. Esta situación lleva a que permanentemente un sector de su plantilla deba acceder a licencias por enfermedad.
Si no se hubieran movido, no se habría logrado nada
Aún no hay fecha de reintegro de toda la plantilla, pero la seguridad de poder mantener el salario (aunque reducido por las condiciones del seguro de paro) y los puestos de trabajo, es algo muy importante en estas circunstancias de emergencia sanitaria y de crisis económica.
Desde el primer día, las trabajadoras y trabajadores de Yazaki Las Piedras se mantuvieron firmes en su reclamo. La persistencia, la constancia de lucha y la unidad de las filas obreras, fue lo que permitió revertir esta situación.
Muchas veces las patronales quieren dividir nuestras filas entre presupuestados y tercerizados, entre inmigrantes y nativos, entre varones y mujeres. Sin embargo, la unidad de la clase trabajadora superó estas divisiones, desplegó la solidaridad obrera y dobló el brazo de la patronal.
Se logró revertir una virtual situación de despido, y eso se logró por la lucha. Esto marca un camino de cómo enfrentar la actitud de las patronales de hacer pagar la crisis sobre nuestras espaldas.
El PIT-CNT, como central obrera, debe tener una actitud de defensa de los conflictos que surgen por la prepotencia de los empresarios. Es necesario darles toda la solidaridad que precisen, generalizarlos y convertirlos una bandera de toda la clase obrera. |