Protestas contra el hambre se desarrollaron en comunas como El Bosque, La Granja, La Pintana, La Pincoya, a dos meses de iniciada con fuerza la pandemia en Chile. El gobierno criminal de Piñera ha sido totalmente negligente, ocultando cifras, queriendo imponer la "vuelta a la normalidad", militarizando el país, e impulsando despidos y suspensiones sin sueldo a cientos de miles de personas. |
Ante la mísera propuesta del gobierno de entregar cajas de alimentos a sectores empobrecidos por la pandemia- mientras impulsa despidos y suspensiones sin goce de sueldo para cientos de miles de personas-, las y los vecinos de El Bosque, comuna de Santiago, se manifestaron, este lunes, en las calles, denunciando la desidia del gobierno y hambre que se está viviendo en las poblaciones.
El gobierno asesino respondió con represión y más militarización en comunas como El Bosque, lo que generó que cientos de personas se enfrentaran con la policía. Piñera tuvo que salir en cadena nacional asegurando que la entrega de canastas familiares se entregarían "de aquí a finales de semana", mostrando la "correlación de fuerzas" que existe tras la revuelta de octubre y el profundo cuestionamiento y bronca por amplios sectores de la población contra este gobierno y régimen criminal.
Arrojan a cientos de miles de personas a la miseria y más pobreza, con una ley maldita que permite y fomenta los despidos y las suspensiones sin remuneración, empujando a la precarización al pueblo trabajador y sectores populares; una nefasta normativa que fue aprobada desde la UDI, pasando por el Partido Comunista y sectores del Frente Amplio.
Reprimieron a las y los pobladores de El Bosque, de La Pintana, de La Granja, y también lo hicieron con los trabajadores en huelga de minera Guanaco, en Antofagasta, quienes tuvieron que enfrentarse a Fuerzas Especiales, en el contexto de una manifestación y corte de ruta, donde incluso un trabajador terminó herido por un disparo de lacrimógena.
El gobierno y los empresarios nos condenan con despidos y suspensiones, hambre, precarización y palos. Ofrece un miserable bono de $65.000 y canastas básicas, mientras van millones a los bancos y empresas.
Hoy es más importante que nunca la unidad y coordinación de trabajadores y pobladores. Exijamos ya:
Sueldo de cuarentena según la canasta básica familiar de $500.000.
Prohibición de despidos y pago de sueldo íntegro a todos los trabajadores.
- Paralización de todos los servicios no esenciales.
Impuesto extraordinario a las grandes fortunas y banqueros.
Control de los trabajadores del sistema de suministro y abastecimiento, para que nadie se quede sin insumos básicos, en unidad con pobladores, asambleas, comités y juntas de vecinos.
La CUT sigue mirando para el lado, mientras se extiende el hambre en las poblaciones y se multiplican los despidos. ¡Paro nacional ya!
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