Los carteros de Correo Argentino logramos que se le realizara el hisopado (porque no querían hacerlo) a un compañero con posible contagio de COVID-19 y la desinfección del establecimiento postal. Fue gracias a la unidad entre los trabajadores y por suerte se terminó la incertidumbre de contagiarse trabajando.

Fue el martes 19 de mayo, luego de enterarnos que un compañero que había viajado a Caleta Olivia y estuviera en contacto con otra persona que resultó ser positivo de COVID-19. Allí comenzó el reclamo a la entrada de la sucursal de Río Gallegos, es que a pesar de tener los elementos de seguridad (barbijos, guantes, mascarillas y alcohol en gel), si hay alguien contagiado puede resultar insuficiente.

El pedido era que se realizara el hisopado correspondiente para tener la certeza de que esté contagiado o no, además que se haga la desinfección del establecimiento postal para que nadie siguiera corriendo riesgo. En caso de que el resultado fuera positivo, que se active el protocolo.

Los carteros decidieron organizarse y en asamblea convocar al sindicato (SITRACYT) para que respaldara nuestra iniciativa, pero no quisieron hacerlo aunque era justificada nuestra incertidumbre de saber si estábamos contagiados o que pudiéramos contagiar a nuestras familias y a la comunidad que depende de nuestro servicio esencial en esta pandemia.

Desde las 7 de la mañana estuvimos presentes y al saber que no querían cumplir con nuestro reclamo, recurrimos a los medios de prensa para que se haga pública la situación de todes les trabajadores de Correo Argentino, porque sabemos que no solamente en Río Gallegos la empresa se rehúsa a activar el protocolo y a pesar de que ya hubo contagios en algunos establecimientos postales como en Barracas (CABA), Monte Grande (Buenos Aires) y en otras sucursales hubo sospecha y los trabajadores debieron imponer el protocolo ante la desidia empresarial en todo el país.

Pero también hay que agregar que durante todo el día de ayer nadie del ministerio de salud del gobierno provincial se acercó a asesorarnos, mientras estábamos exigiendo respuestas.

El apoyo de les trabajadores de prensa en Río Gallegos fue muy importante para empezar a hacer pública nuestras preocupaciones, ya que no queremos que nadie corra riesgos (ni nosotros, ni nuestras familias, ni la comunidad a la que le brindamos servicio diario).

También se sumaron a nuestro reclamo y nosotros fuimos parte de sus reclamos les trabajadores despedidos de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (hubo 417 despidos en febrero), docentes que reclaman el cierre de cursos en Santa Cruz y quedan sus compañeres sin trabajo, trabajadores de la salud, municipales despedidos de Río Gallegos (fueron despedidos en diciembre del 2019), la CTA Autónoma, Partido Obrero, Movimiento Socialista de Trabajadores, el Partido de los Trabajadores Socialistas y La Izquierda Diario.

Todos colaboraron para que rápidamente se realizara el hisopado del compañero y afortunadamente diera negativo (un gran alivio), mientras a las 16 horas del martes 19 de mayo, realizaron la desinfección de la sucursal y finalmente retornamos a nuestro trabajo, más tranquilos, pero concientes de que es importante la unidad de todes les trabajadores para que no se corra riesgo de vida. Debemos cuidarnos nosotros mismos.

Fue un triunfo en una ciudad alejada del resto del país, pero muy significativa para los carteros y para quienes nos acompañaron ya que durante todo este tiempo de cuarentena y pandemia somos las y los trabajadores los que más estamos expuestos a los riesgos de contagio.

Que el resto de les compañeres del Correo Argentino se enteren, los trabajadores y también quienes son esenciales que, nuestras vidas valen más que sus ganancias.

A continuación dejamos para nuestros lectores una entrevista que le hicieron a los trabajadores del medio El Nuevo Día