Como docente de nivel inicial, la situación que se vive es alarmante, y se profundizó luego de decretarse la cuarentena obligatoria. La imposibilidad de estar frente a las aulas, provocó que el nivel inicial, principalmente el nivel maternal, se encontrara en crisis. Porque nunca hubo verdaderas políticas estatales para este nivel, de parte de los gobiernos ajustadores, tanto el actual del Frente de Todos, como de sus antecesores de Cambiemos. Teniendo en cuenta que la mayoría de los niños y niñas que asisten a ellos, es a causa de que ambos padres deben salir a trabajar, para poder llegar a fin de mes. Al no encontar lugar en jardines maternales estatales, se ven obligados a llevar a los niños a aquellos de caracter privado que tienen cuotas elevadas e irrisorias. Cada vez, aumenta más la demanda de estas empresas que lucran con esta situación y precarizan a sus trabajadoras.
En este momento de crisis, lo que plantean los dueños de estas instituciones es la “baja” arbitraria de los alumnos que sus padres no pueden pagar las cuotas, y es la suspensión de los docentes o el cierre de las instituciones.
La falta de jardines maternales estatales ante esta necesidad familiar, desnuda la falta de interés por parte del estado por proveer un servicio tan esencial para los padres trabajadores.
Las docentes somos el primer eslabón de la educación, en su mayoría mujeres, y madres sostén de hogar. Por ello, exigimos que tanto el gobierno provincial de Axel Kicillof y el ministro de Educación de la Nación Nicolás Trotta, tomen nota de lo que está sucediendo con las y los trabajadores de la educación y con la educación en general, porque frente a ello, también se esta jugando con el derecho de los niños a recibir una educación de calidad.
La cuarentena a causa de la pandemia del Covid-19, cambió por completo el trabajo, que se realiza con las clases online, y el vínculo se debe reforzar a través de diversas aplicaciones, las cuales, no todos tienen acceso a ellas. Ademas, no solo aumentó la carga horaria, al ser la mayoría trabajadoras mujeres también deben realizar las tareas laborales del hogar, y pagar los servicios, tanto de luz como de internet, que salen de su ya pobre salario. Salario, que en estas instituciones privadas viene siendo recortado, en su mayoría desde el mes de Marzo, con el pago del 70% del salario; en el mes de Abril se redujo a un 50%; y ya durante éste mes, llegaron las suspensiones.
Como es en mi caso, soy trabajadora de un jardín maternal de la localidad de Longchamps, en la provincia de Buenos Aires. Un jardín que frente a la crisis, suspendio a dos de sus docentes, una perteneciente al maternal y otra al nivel inicial. Vale recordar, que el salario docente ya de por si no alcanza a cubrir la canasta basica familiar y frente, a esta crisis, las medidas que se toman como la IFE no son suficientes, o directamente se toman medidas de ajustar a los trabajadores, como con el acuerdo entre la CGT, la UIA y el gobierno para recortar un 25% el salario a las y los trabajadores.
La precarización laboral afecta principalmente a los jóvenes con trabajos no registrados, o falsa regularidad. Esto se vive de la mano de contratos basura, que duran solo 10 meses y no tenes derecho a reclamar vacaciones. Frente a todo esto, los sindicatos mayoritarios como SUTEBA o ATE, no realizan nada en defensa de las y los trabajadores de la educación. En el caso de los auxiliares que también forman parte de la educación, muchos de ellos, no están afiliados.
Las medidas que se vienen llevando en contra de la educación y los derechos laborales, son pasadas por alto, sin iniciar acciones en defensa de los puestos de trabajo y de la tan mencionada “continuidad pedagógica”. Somos las y los docentes, que ponemos el cuerpo día a día, los que defendemos la educacion. Somos los que están en primera línea, repartiendo los bolsones de comida a las familias, de los cuales se viene denunció lo escasos que son. Los docentes tanto estatales como privados, tenemos el derecho a organizarnos, a luchar por un salario digno y por la defensa de nuestros puestos laborales.
Docentes precarizados, suspendidos, despedidos, sin cargo y sin la posibilidad de tomar alguno. Es el panorama de esta crisis, que no exenta a ningún trabajador. Nosotros no tenemos que ser los que paguemos los platos rotos de esta crisis; que la paguen los que se vienen beneficiando desde hace años de precarizar a sus trabajadores, los bancos que son los que mas ganaron durante este tiempo y los culpables de endeudar el país. |