Los trabajadores de Expreso Argentino, horas después de haber realizado una importante marcha en reclamo de los salarios adeudados y la defensa de los puestos, permanecían en el acampe ubicado en los portones de la empresa cuando llegó la policía con una orden de desalojo, de la fiscal Valeria Panozzo.
A través de sus redes llamaron "a toda la comunidad, organizaciones sociales y políticas a reforzar la permanencia en nuestro acampe. La empresa debe dar una respuesta a las familias trabajadoras que hace tres meses que no nos pagan el salario. Exigimos al gobierno que intervenga. Por nuestros salarios y nuestros puestos de trabajo".
La abogada de los trabajadores y trabajadoras de Expreso Argentino, Natalia Hormazabal, se hizo presente en el acampe y denunció que "mientras subsecretaría de Trabajo se desentiende del conflicto de Expreso Argentino, con una rapidez admirable, el Ministerio Público Fiscal está listo para avanzar contra trabajadores y amenaza con desalojar acampe".
Al conocerse la amenaza las mismas organizaciones que durante la mañana acompañaron la movilización en reclamo de los salarios adeudados y los puestos de trabajo, se hicieron presentes. El diputado del Frente de Izquierda Andrés Blanco responsabilizó al Gobierno de Omar Gutiérrez.
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