En declaraciones a Radio Cooperativa el CEO de LATAM, Roberto Alvo, señaló que para resolver su situación actual la aerolínea necesita $2.000 millones de dólares, de los cuales la mitad será puesto por sus accionistas.
El gerente justificó la necesidad del apoyo estatal a LATAM asegurando que "Nos parece que corresponde, que es justo, revisar un eventual apoyo para Latam, como lo han hecho países europeos, países americanos, que se dieron cuenta de lo importante que era la industria aérea para sus economías".
En medio de una crisis enorme con desempleo y hambruna creciente el CEO de la millonaria aerolínea traslatina hace un llamado al rescate estatal de la empresa "Mi trabajo como gerente general es salvar la compañía, estoy abierto a cualquier solución. Lo más importante, el parámetro que a mí me importa es que si entra el Estado, la retribución para el Estado sea justa".
Esto solo atiende a asegurar las ganancias de la millonaria familia Cueto y demás accionistas de la aerolínea, sin embargo nada asegura que se resguarden los puestos de trabajo de los 42 mil trabajadores que tiene la empresa a nivel internacional.
Ya vimos un primer ataque con los despidos de mayo, a pesar de haber realizado recortes y suspensiones en todo el país. Ahora se viene el salvataje del Estado para resguardar, con fondos fiscales, es decir de toda la población, los negocios de los accionistas de LATAM.
Los servicios aeronáuticos son elementales para el traslado de personas y mercancías en medio de esta pandemia y dejar este importante servicio en manos de los intereses privados de un puñado de accionistas ya se demostró catastrófico.
A los Cueto y demás accionistas de LATAM no hay que darles ni un solo peso. Al contrario, empresas estratégicas como ésta deben ser nacionalizadas, bajo control de sus trabajadores, y puestas al servicio de las necesidades del pueblo. |