Por la tarde de este lunes, a través de una videoconferencia encabezada por el titular de la comisión, Carlos Alberto Fernández (UCR), el ministro de defensa, Agustín Rossi, participó de la reunión con los diputados, junto al jefe de Estado Mayor Conjunto, general de brigada Juan Martín Paleo, y el comandante operacional, general de brigada Martín Deimundo Escobal.
El ministro en su informe reiteró que las Fuerzas Armadas que conduce, desde que comenzó la cuarentena están realizando "el despliegue militar más importante desde la recuperación de la democracia o desde guerra de Malvinas".
Rossi, además, informó sobre cuál es el despliegue que están haciendo en todo el país. Y detalló que "del total de los efectivos, las fuerzas desplegaron 56.000, pero hay que tener en cuenta que los 80.000 que las integran están alineados".
Cuando enumeró las tareas que están realizando, quedó claro que bien podrían ser realizadas por los trabajadores especializados en esas áreas. Además, el Ministerio de Defensa debería poner toda la infraestructura que se encuentra en su poder, a disposición de que estas tareas puedan realizarse.
El general Escobal, estuvo a cargo de detallar algunas de estas actividades, a las que se refería Rossi en su exposición. Escobal mencionó que el laboratorio del Estado Mayor Conjunto se puso a disposición para la fabricación de alcohol en gel; y en la sastrería del Ejército se confeccionaron barbijos y camisolines.
Los trabajadores de fábricas recuperadas, como la gráfica MadyGraf ubicado en la zona norte del conurbano, o la textil Neuquén, que no tienen el apoyo del gobierno, ni son las beneficiadas del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP), que el Gobierno le brinda a empresas multinacionales que tienen ganancias millonarias. Así y todo, estas empresas ejercen la solidaridad de clase, y producen para repartir entre los habitantes de los barrios populares. ¿Para que los militares realizan estas tareas? ¿Por qué cocinan y reparten comida en los barrios carenciados?, otra actividad que hace años están a cargo de los comedores y organizaciones populares.
El propósito de esto es que los militares ejerzan un poder de persuasión de las protestas contra el hambre, los despidos o rebajas salariales, y a su vez represtigiar a los militares.
Por eso Agustín Rossi no se cansa de repetir, cada vez que tiene la oportunidad, de que durante esta cuarentena, están haciendo el despliegue militar, más importante desde que salieron de la dictadura. |
