A raíz de la crisis del sector salud en la provincia, agravada por la pandemia de Covid-19, el gobernador Axel Kicillof junto a su ministro de Salud, Daniel Gollan, anunciaron este miércoles que el Estado ayudará al sector de medicina privada, por la "caída de ingresos", producto de que menos gente se atiende en las clínicas privadas, según afirmaron.
Durante su alocución, Kicillof, afirmando que era una medida que calificó de "histórica", dijo que se va a dar una "integración entre el sector público y privado", a través de un acuerdo con el Gobierno provincial junto a Ioma y el sector privado en materia de prestaciones.
En concreto, lo que se hará -según se afirmó en la conferencia- es en realidad un rescate a las empresas privadas de salud, con plata de Ioma (es decir de sus afiliados), de nada menos que 400 millones de pesos por mes, que los privados devolverán en un futuro indefinido sin interés y en 12 cuotas.
Kicillof afirmó que la situación crítica a la que se llegó en la provincia en materia de salud se dio por distintos "factores históricos", liberando así de cargo y culpa no solo a las gestiones peronistas desde la década del ’80 acá, sino también a los cuatro años de la administración macrista de María Eugenia Vidal y -por supuesto- a todas las empresas que lucran con la salud hace décadas.
Estas empresas, a las que Kicillof presentó como "empresas familiares" y "verdaderos trabajadores de la salud", son las principales responsables de vaciar al sector público (a partir de leyes que votaron los sucesivos gobiernos) y de haber avanzado en la privatización de un servicio esencial, como es la salud.
Son estas empresas que -junto a los negociados que supieron tejer con el Estado- ganaron (y siguen ganando) millones, a este sector es que el gobernador Kicillof quiere rescatar debido a su supuesta "baja de ingresos", con la ayuda nada menos que de Ioma, a sabiendas de que (como puede atestiguar cualquier trabajador público bonaerense) atraviesa un crisis profunda, producto del desfinanciamiento de hace décadas, bajo todos los signos políticos. | 
