Organizaciones sociales y de trabajadores desocupados realizaron este jueves concentraciones, movilizaciones y ollas populares en reclamo de medidas que atiendan las necesidades más elementales.
Se trata de una jornada de carácter nacional, con cortes de ruta, concentraciones y ollas populares en más de veinte ciudades del país, con epicentro en el centro porteño y en la ciudad de La Plata. Está organizada por el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), el Polo Obrero, el Frente Popular Darío Santillán, el Movimiento Barrios de Pie-Libres del Sur y el MTD Aníbal Verón, entre otras.
A mas de ochenta días de cuarentena obligatoria en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y con la recesión que golpea en todas las provincias del país, la jornada convocada por estas organizaciones tiene como fin la exigencia de respuestas por parte del Estado, ante la pérdida de ingresos en amplios sectores de trabajadores, particularmente en aquellos que se encuentran precarizados y desocupados.
Entre los principales reclamos se destacan la asistencia alimentaria en los comedores (que se calculan por más de 10.000 en todo el territorio nacional), medidas sanitarias en esos espacios, la provisión de kits sanitarios en éstos y en los barrios populares.
También plantean la necesidad de una actualización de los montos de los planes sociales y la Asignación Universal por Hijo (AUH). Proponen planes de obras públicas para generar empleo y un ingreso de $ 30.000 para todos los desocupados.
Esta jornada se suma a las ya realizadas por estas organizaciones desde el inicio del aislamiento social obligatorio. Algunas de ellas fueron organizadas a principios de mayo, otra jornada se llevó a cabo a fines del mismo mes y este martes hubo protestas también en el Puente La Noria.
Estas manifestaciones se dan como respuesta a la degradación de las condiciones de vida de amplios sectores de la población, producto del desempleo, los despidos, las suspensiones y la imposibilidad de trabajar para quienes están precarizados o viven de "changas".
En el caso del centro porteño, se realizaron en principio dos concentraciones, una en el Obelisco y otra en el Ministerio de Desarrollo Social, las cuales finalmente confluyeron en la sede de la cartera dirigida por Daniel Arroyo.
Allí también estuvieron, como en otras de las movilizaciones, referentes del Movimiento de Agrupaciones Clasistas (MAC) como Ana Laura lastra y Lorena Itabel de la agrupación Marrón Clasista de ATE y Marilina Arias de la Corriente Nacional 9 de Abril y de la conduccion del gremio docente Ademys, y miembros de la la Red de Trabajadores Precarizades e Informales.
Mención aparte merece el tratamiento que se le está dando a estas protestas en algunos medios de comunicación, incluso aquellos que son considerados como progresistas. En las últimas horas se pudo escuchar de parte de un conductor de C5N una queja hacia quienes se están movilizando.
En comunicación con el móvil desde el Ministerio de Desarrollo, ese conductor sostuvo entre otras cosas que éste "no es el momento", por estar en medio de una pandemia; que al reclamo se lo "hace para provocar", para "mostrar un poder", y "sacar rédito político". Sus colegas, para reforzar esa idea, mencionaron la movilización realizada por la izquierda la semana pasada en repudio al asesinato de George Floyd en Estados Unidos por parte de la Policía racista de ese país, tildándola de (también) innecesaria.
Llama la atención que algunos periodistas se ocupen en mayor medida de deslegitimar protestas por medidas básicas alimentarias, económicas y sanitarias, que de señalar cómo, en lugar de atender estas cuestiones que afectan a los sectores mas empobrecidos, desde el Gobierno se continúa dando prioridad a cuidar las ganancias de los grandes empresarios y en los casos que es anunciada alguna medida que podría llegar a afectarlos aunque sea minímammente, a las horas se escuchan declaraciones para retroceder de tales anuncios, para pasar a mostrarse conciliador con los "vivos de siempre" y verdaderos dueños del país.