En un fallo ajustado, finalmente 4 de 5 jueces estadounidenses finalmente decidieron mantener en pie el programa Acción Diferida Para los Llegados en la Infancia (DACA), implementado bajo la administración de Barack Obama, que impide la deportación de cientos de miles de hijos de inmigrantes -conocidos como "Soñadores"-.
Los jueces argumentaron que los fundamentos de Donald Trump para dar de baja el programa son débiles, aunque dejó la puerta abierta a que si el presidente diera otros fundamentos, podrían finalmente darle de baja.
De todas formas, este fallo es un golpe a la administración de Trump, que hace del discurso xenófobo y antiinmigrante uno de sus ejes de campaña. Todavía no está claro como se realizarán las elecciones presidenciales en noviembre pero el magnate continúa firme en su estrategia de consolidar su base dada su incapacidad de presentarse como hegemónico. Por otro lado, su contrincante Joe Biden está subiendo en las encuestas aunque es un candidato con un alto nivel de rechazo entre los votantes Demócratas.
Además la corte tiene mayoría conservadora, pero en el falló al final se dio vuelta el presidente del tribunal, John Roberts (conservador) y terminó acompañando la votación faborable, a pocos meses de la elección presidencial, distanciándose de la política oficial de Trump.
Este fallo es un alivio momentáneo a los 700.000 "Soñadores", que permanecerán protegidos de la deportación y serán elegibles para obtener permisos de trabajo renovables de dos años.
Este el segundo fallo "progresista" de la Corte Suprema de EE.UU que anteriormente había votado a favor de los derechos de las personas LGTBI.
Estas votaciones, se dan el marco de las movilizaciones masivas en varios estados norteamericanos, a raíz del asesinato a manos de la policía de Minneapolis de George Floyd, que llevó a que cientos de miles cuestionaran el racismo estructural de los Estados Unidos. Es por eso que estos fallos deben ser leídos como un intento del tribunal de legitimarse ante la opinión publica y no como un cambio de opinión o un giro político de sus integrantes.
Por su parte Donald Trump salió rápidamente a repudiar el fallo del Tribunal Supremo por redes.
Desde su cuenta de Twitter se preguntó si alguien "tenía la impresión de que la Corte Suprema lo rechazaba", y diciendo que la decisión de la Corte “es horrible y políticamente cargada” y que era “balazos en la cara de personas que se enorgullecen de llamarse republicanos”.
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