El reclamo por el pago de aguinaldo y apertura de paritarias para todos los estatales se hizo sentir en las calles del centro mendocino. La respuesta del gobierno fue un gran operativo policial con infantería y canes para acosar a manifestantes e intentar impedir el reclamo
Durante la semana pasada el gobierno de Suárez anunció el pago de la deuda con los bonistas locales de 380 millones de pesos, al tiempo que comunicaba la postergación y pago escalonado del aguinaldo a partir de septiembre. Esta medida provocó gran malestar entre trabajadores estatales y de la educación que vienen sin tener paritarias y con un salario deprimido por la inflación, la cual es mayor al 11% en lo que va del año.
El punto de partida del caravanazo fue el Parque Central, tomando las medidas de distanciamiento social y con un protocolo de seguridad e higiene. La fuerte presencia policial se sintió con acoso a quienes iban llegando al punto de encuentro.
El recorrido por las calles céntricas sumaba aplausos y bocinazos de apoyo. Finalizó en una Casa de Gobierno con un enorme despliegue de policías y presencia de infantería. Las organizaciones sindicales del Frente de Unidad Estatal convocante fueron SUTE, ATE, UPJCM, Judiciales, APEL y se sumaron SiTEA y ATSA.
Cientos de trabajadores se hicieron presentes en el reclamo contra el ajuste del gobierno, reclamando por los salarios, con la exigencia de apertura de paritarias y el pago del aguinaldo en tiempo y forma. Se suman las exigencias por las condiciones laborales de las y los docentes ante la virtualidad. La medida tomada para hoy es la retención de actividades con apagón virtual. También participaron las y los trabajadores de la salud, que están en la primera fila combatiendo la pandemia, por falta de insumos en hospitales como de las medidas de seguridad e higiene para evitar el contagio.
Se destacó en estos días el importante reclamo de las y los municipales de la Capital de la Ciudad de Mendoza contra los sueldos de hambre y miseria: trabajadores pobres y funcionarios ricos, se lee en sus carteles. Durante el fin de semana fueron reprimidos por la Policía, lo cual se ganó el repudio de distintas organizaciones de DDHH, sindicales y personalidades políticas. Seguirá el estado asamblea permanente y hoy con paro de actividades.
La unidad de las y los trabajadores viene siendo de gran importancia para enfrentar el ajuste y que la crisis no caiga sobre los flacos salarios del que dependen miles de familias. Hace falta desarrollar el debate en todos los lugares de trabajo, a pesar del aislamiento para darle continuidad al plan de lucha, coordinando las acciones ante los ataques que profundiza el gobierno.