Los empleados de un corralón se manifestaron ayer en Pueyrredón 5880 frente al local, cortando accesos e impidiendo que los camiones que trasladaban materiales para la construcción circulen, hasta que llegó personal policial que los detuvo en las dependencias de la seccional 21ª . La detención fue ordenada por el fiscal José Luis Caterina, de la Unidad de Flagrancia. Según informa Rosario Nuestro los trabajadores reclamaban un aumento salarial y tenían intenciones de cambiarse de gremio.
La patronal es el Grupo Razzini, que hace 40 años comenzó como un corralón familiar y ahora cuenta con corralón, oficinas administrativas y la planta industrial de Hormigones Ricci. Como sucedió en el conflicto de Electrolux el año pasado que desde la fiscalía hostigaban a los trabajadores en lucha para que dejen de tomar medidas como el acampe en la puerta de la fábrica y criminalizarlos, el juez Hernán Postma desestimó la medida cautelar de desalojo solicitada por la patronal metalúrgica y la fiscal Valeria Haurigot, reconociendo una vez más que el conflicto era de índole laboral y que estaban ejerciendo su derecho a la protesta. En el caso de los trabajadores del corralón Razzini, la policía de Perotti se despachó contra estos laburantes que reclamaban por sus condiciones de trabajo y sienta un preocupante antecedente en un momento donde la crisis económica y sanitaria se agudiza e inevitablemente habrá más luchas de trabajadores reclamando por sus derechos. |
