La medida de fuerza llevó a que el local cerrará sus puertas y que pudieran lograr el aislamiento de los trabajadores. Este gran ejemplo hizo retroceder a esta multinacional. Aunque todavía la empresa no mencionó nada sobre los testeos, con el paro y el delegado que se encadenó, los empleados dieron un gran paso en la defensa de sus derechos y sus vidas.
Hace unas semanas atrás ya habían realizado otro paro porque Carrefour no les pago un bono y no les garantizaba elementos de higiene y seguridad, así como ropa de trabajo.
Los aumentos de casos en los supermercados comienzan a ser moneda corriente. A las grandes empresas como Carrefour o Coto hace poco lo único que les interesa son sus ganancias, aunque tengan que poner en peligro la vida de sus trabajadores.
Mientras sus ganancias son millonarias, en los Carrefour de AMBA, ya se contabiliza más de 129 casos de coronavirus. No impulsan los hiposados ni tampoco brindan los elementos básicos de seguridad e higiene. Es necesario test masivos para el conjunto de los trabajadores de los supermercados para proteger sus vidas.
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