Los trabajadores pasaron todos estos meses, desde diciembre, en una lucha sostenida para exigir la reincorporación de los trabajadores despedidos.
En una rueda de prensa que brindaron en el momento en que comenzaba el juicio, la abogada de los trabajadores y del SAT, Pastora Filigrana, explicaba que "los trabajadores han demandado a esta empresa, que se subrogó en la subcontrata de Alestis de diciembre de 2019, y dejó fuera a 35 trabajadores, en contra de la ley y del Estatuto de los Trabajadores". Y denunciaba el accionar antisindical de la empresa: "Curiosamente son los miembros del comité de empresa y personas que estuvieron en huelga en defensa de sus reivindicaciones", ha descrito la abogada y miembro del SAT.
Tras este primer triunfo de la lucha, entrevistamos a Manu Gálvez, presidente del Comité de empresa de los trabajadores de LTK-Alestis.
Tras casi 150 días de una lucha muy dura habéis ganado una batalla muy importante, logrando que se consideren despidos nulos judicialmente. ¿Cómo habéis logrado esto?
Manu Gálvez: Es la victoria de la resistencia, de una lucha sostenida durante 160 días. 160 días en la puerta de NUESTRA fábrica peleando por recuperar nuestros puestos de trabajo, confrontando nuestros intereses con los de un clan de multimillonarios, los Clemente.
¿Cómo sigue ahora la lucha?
MG: La guerra sigue, aún no sabemos si recurrirán o buscarán alguna artimaña para evitar la ejecución inmediata de la sentencia. Sabemos que la ley está hecha para proteger sus intereses y dilataran lo inevitable lo máximo posible (con la venía del sistema). Nosotros continuaremos luchando en la puerta, ahora más motivados por esta sentencia, hasta recuperar nuestros puestos de trabajo. Somos conscientes que la patronal irá por nosotros, no conviene que nuestro ejemplo se exporte. Estamos curtidos y preparados para los golpes.
¿Cuál ha sido el papel de la solidaridad en esta lucha, con otros colectivos apoyando?
MG: El papel de la solidaridad ha sido fundamental a muchos niveles. Llevo 8 años militando y nunca había visto tanto apoyo en un conflicto laboral. Nos han dado fuerzas para seguir, nos han oxigenado cuando más lo necesitabamos, han estado en momentos duros cuando solo éramos 4-5 en la puerta. Nunca nunca nos han dejado solos. Determinantes a la hora de exportar el conflicto y aumentar la conciencia de mis compañeros. Esta victoria es 50% fruto de la solidaridad de clase.
¿Qué rol ha tenido el gobierno del PSOE-Unidas Podemos en este conflicto y qué le exigís ahora?
MG: El rol de Unidas Podemos y PSOE (teniendo en cuenta que el 25% de Alestis es pública) debería haber sido, como mínimo, el de exigir explicaciones a Alestis sobre nuestros despidos. No sólo no ha hecho ese trabajo de responsabilidad, sino que además, prometiendonos reuniones inexistentes y pidiéndonos tiempo, han intentado desmovilizarnos e incluso que cambiemos nuestras exigencias. Han elegido bando, y en nuestro caso se han posicionado junto a la empresa.
Se vienen tiempos difíciles con empresas que quieren echar el cierre o despedir masivamente. En los casos de Alcoa o Nissan sectores de trabajadores están planteando la nacionalización de la empresa sin indemnización, porque son empresas que han recibido millonarios fondos públicos. ¿Qué opinas de esto?
MG: Nuestra experiencia es que la nacionalización si no se pone en manos de la clase obrera sólo sirve para rescatar a capitalistas. Basta ya de usar nuestro dinero para rescatar a sus amiguetes. En nuestro caso que 1/4 parte de la empresa fuera de capital público no ha cambiado absolutamente nada. |