Las redes sociales se han saturado con críticas hacia su persona por semejante palabras que definitivamente degradan a los pueblos originarios.
El racismo que expresó Córdova merece la condena, a él y a las instituciones de este régimen asesino por su hipocresía, ya que ellos hablan de igualdad, democracia y justicia de forma demagógica. El discurso de la inclusión no es más que un instrumento con el que pretenden disfrazar su verdadero carácter, explotador y opresor.
Para analizar la actitud que Córdova tuvo hacia los pueblos indígenas podemos recuperar al sociólogo peruano Aníbal Quijano y un concepto muy interesante que él tiene, la colonialidad del poder.
Este concepto lo usa para explicar cómo se configuraron las relaciones de poder en América Latina, de cómo el factor raza y el factor clase se combinaron para crear una forma de dominación que tuviera que ver con la separación entre blancos e indígenas (entre otros), donde los primeros eran los amos de la tierra y de la riqueza mientras que los otros eran los explotados por los primeros.
Es claro que Lorenzo Córdova encaja en ese patrón de dominación, lo reproduce. Pero no se trata de su color de piel: Córdova no es más que un alfil en el monstruoso ajedrez del asesino régimen mexicano. La descalificación y el desprecio hacia los pueblos originarios constituye una operación ideológica histórica para justificar el colonialismo y el despojo, y con el desarrollo capitalista, la expoliación a un grado aun mayor de los recursos de México.
Entre la corrupción del caso OHL-Edomex y los escándalos del PVEM
Ahora lo que debemos preguntar es ¿por qué si la charla fue el 23 de abril de este año salen hasta ahora esos audios? ¿Qué hay detrás de esto? ¿Quiénes hicieron públicos estos audios?
Si bien no todas estas preguntas es posible responderlas, sí nos permiten reflexionar acerca de lo que sucede en México. Es curioso que este audio-escándalo surja justo cuando están ocurriendo dos eventos relevantes en política, los escándalos de la corrupción del gobierno del Estado de México y la constructora OHL y las irregularidades del Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
El gobierno del Estado de México de Eruviel Ávila del PRI está sumido en un escándalo de corrupción por brindar beneficios ilegales a la empresa constructora Obras con Huarte Lain (OHL), como señalamos aquí. El gobernador Eruviel Ávila Villegas aceptó la renuncia de su secretario de comunicaciones, Apolinar Mena Vargas, después de ser exhibido en audios que circularon por la página de video YouTube, pidiendo favores a directivos de OHL México para pasar unas vacaciones en un hotel de lujo del Caribe mexicano.
Posteriormente, según el diario La jornada de 19 de mayo de este año, en la nota “Se investigará a OHL en varios frentes en Edomex”: “dos directivos de OHL admiten haber cometido irregularidades como sobreprecio en la obra y ´amaños´ para obtener autorizaciones de la Secretaría de Comunicaciones con el propósito de elevar el precio del peaje en esta vialidad (Viaducto Bicentenario), el gobernador instruyó a la Secretaría de la Contraloría a iniciar una profunda investigación para determinar si este consorcio ha incurrido en alguna ilegalidad en perjuicio del gobierno mexiquense o de los usuarios del Viaducto.”
En cuanto al PVEM, este partido incurrió en incumplimiento de la ley electoral al difundir y repartir propaganda cuando no tenía permitido hacerlo. Sin embargo, hasta ahora sólo recibió como sanción tres días de no poder transmitir sus spots televisivos.
Crisis del INE
Este escándalo, a pocas semanas de un cuestionado proceso electoral, profundiza la crisis del INE. Según el estudio “México "México, anatomía de la corrupción" llevado a cabo por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) en colaboración con el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), la inmensa mayoría de la población mexicana no tiene confianza en los partidos tradicionales, ni en las fuerzas policiales, los funcionarios públicos, poder legislativo y judicial.
Ayotzinapa, Tlatlaya, la “casita blanca” de Angélica Rivera, la mansión de Videgaray en Malinalco, ahora el escándalo de OHL y el gobierno del Estado de México, la represión a los jornaleros de San Quintín, ordenada por la “casta política” que gobierna en Baja California y es propietaria de las empresas agrícolas que exportan hortalizas a Estados Unidos, y la lista es interminable. Cada uno de estos hechos demuestra que el régimen del Partido Revolucionario Institucional (PRI)-Partido Acción Nacional (PAN)-Partido de la Revolución Democrática (PRD) a cada paso demuestra que es irreformable.
Estas elecciones que pretenden desviar el descontento contra este régimen asesino, que no respeta ni su propia legalidad o lo hace cuando le conviene, que es por naturaleza racista, opresor y corrupto, y no ofrece nada más que miseria y desempleo. Por eso, según declaraciones de Jimena Vergara, maestra de la UNAM y dirigente del Movimiento de Trabajadores Socialistas, frente a este proceso electoral la única salida para no avalar al régimen del PRI-PAN-PRD es anular el voto y escribir en la boleta la consigna #Nosfaltan43. | 
