La mayoría de los contagios se habrían registrado en la subcontratista GECO. La Minera Exar ya la habría notificado para que tome medidas de cuarentena y aislamiento como medida de seguridad para todos sus trabajadores y los que dejan el campamento.
La falta de información de parte de la empresa, como la demora en los resultados de quienes dieron positivo y quienes no, que en algunos casos llega una semana sin que den los resultados luego del hisopado; como la faltas de medidas de seguridad y el cumplimiento del protocolo que garanticen el aislamiento lleva a que los trabajadores sigan compartiendo habitaciones, baños comunes, etc, facilitando que se expanda todavía mas el contagio entre los trabajadores.
Mientras los jefes, directivos, fueron los primeros en regresar a la ciudad, son mas de 300 trabajadores que continúan en el campamento de la minera, aunque la producción esta paralizada en su mayor parte, hay sectores como perforaciones que continua en actividad.
Los trabajadores muestra el disgusto también por lo que consideran “el abandono del sindicato”, de la UOCRA, a quienes los trabajadores solicitaron que reclamen por su situación de riesgo y que no hizo cumplir los protocolos de seguridad que podrían haber evitado el contagio masivo que hoy se registra en la empresa.
“…Que se den los resultados de los test con más celeridad y a la UOCRA no tan solo cobre la cuota sindical y que ayude a la gente, acá me acaban de decir que hay un compañero que está colorado de la fiebre que tiene y dice que fue al servicio médico y no le quisieron atender…” denunciaba un trabajador de la mina.
A pesar de la situación angustiante que viven los mineros por los contagios, ya tomaron algunas medidas de autoprotección entre ellos. Además de la higiene y limpieza, turnos para almorzar y desayunar, como auto aislarse en cada habitación entre los que esperan los resultados y los que dieron positivo.
El miedo al contagio, como a los despidos y que la empresa tome medida de castigos a aquellos trabajadores que se atrevan a denunciar las condiciones en la que se encuentran, no merma la bronca creciente y odio a los empresarios que expusieron a esos mineros al contagio, poniendo por delante sus ganancias, que la vida de los trabajadores que hoy están en la incertidumbre. |