El último sábado, en Barrio Fonavi de San Nicolás, la policía local volvió a ser protagonista de la política represiva impartida desde el Estado, ante el crecimiento imparable de la otra pandemia, la curva de la miseria y el hambre.
Trascendió en medios locales que un joven de 24 años fue detenido aplicándole el aprisionamiento del cuello con la rodilla. El padre del joven, al encontrarse con esta situación, fue desesperado a ayudarlo y también fue detenido. Se trata de un hecho grave que se suma a la serie de acontecimientos donde las fuerzas represivas del estado, imparten una orden de control social sobre los barrios de trabajadores y populares
Todos los días recorren los medios noticias sobre allanamientos, represión con gatillo fácil y persecuciones policiales. En nuestra ciudad, una persecución llevó al asesinato de los jóvenes Ezequiel y Ulises, caso que aún se mantiene impune. Durante el fin de semana, la Guardia Urbana Municipal de Rosario detuvo a un feriante golpeándolo gravemente. La lista se vuelve interminable: más de 80 días que la familia de Facundo Castro reclama su aparición con vida.
Ni errores ni excesos: política de estado
Los casos de violencia policial que se suceden en la Provincia de Buenos Aires y en el resto del país no son casos sueltos ni descolgados. Sergio Berni, el Ministro de Seguridad estrella de Kicillof, anticipó con su “arenga castrense” que en las fuerzas no iba haber lugar para tibios, y hasta ahora se demostró que es algo que se disponen a cumplir.
Mientras escribimos estas líneas, vemos en las noticias que la policía allana en Villa Pueyrredón la casa de Carlos Arce, docente de la escuela Rodolfo Walsh. Del brutal allanamiento se lo llevan detenido y esposado, destrozando su computadora personal. Se trata de la misma policía federal que debería investigar la desaparición de Facundo, y que la familia pide que se aparte del caso.
La preparación del Régimen Político ante estos hechos anticipa lo que se viene, contener con represión lo que no están dispuestos a responder, mientras avanza la desocupación y despidos en una zona industrial que se torna crucial a los planes de ajuste, para que la crisis la sigan pagando los trabajadores y el pueblo pobre. Claramente una política de estado. Son todos casos sin respuesta por parte de los responsables políticos.
En este sentido, fue un paso muy importante la audiencia pública virtual, convocada por las diputadas y diputados del Frente de izquierda, Nicolás Del Caño, Myriam Bregman, Claudio Dellecarbonara y Alejandrina Barry, junto a Nora Cortiñas, que se llevó a cabo el pasado viernes y a la que se sumaron personalidades de DDHH, familiares y víctimas por decenas.
|