Según un informe oficial de las autoridades del Hospital, al día de la fecha hay 165 contagios entre el personal por “contacto estrecho”. Pero la realidad es que faltan testeos, acondicionamiento de salas para pacientes COVID, el aislamiento llega tarde y se niegan las licencias al personal de riesgo.
Para las autoridades del gigante pediátrico parece que todo funciona muy bien y que los contagios entre los trabajadores, según un informe elaborado, se dan por el contacto estrecho. En consonancia con los dichos por el ministro de salud Ginés González García, quien sostiene que la "indisciplina social" favoreció a los contagios, en el Garrahan la responsabilidad cae de manera individual en los mismos trabajadores, ya sea por contagiarse de algún familiar o por realizar su labor diaria con el resto del equipo de salud.
El informe de la Dirección indica que "del total de los casos de trabajadores contagiados, solamente se podrían asumir 2 casos como posibles contactos de paciente, ocurrieron hace aproximadamente 1 mes. El resto de los casos de personal guardan relación con contactos familiares que iniciaron síntomas previamente a los agentes, y también con contactos con otros compañeros de trabajo, posiblemente en los momentos de descanso o refrigerio, en los que obviamente existe una disminución de las medidas de protección".
Desde el inicio de la pandemia, los trabajadores del hospital denuncian la falta de protocolos claros para poder atender y no exponerse a situaciones de contagio, como así también de EPP de calidad, ya que hoy en día se trabaja con barbijos que no están avalados por el Instituto Nacional para la seguridad y salud ocupacional (NIOSH, por sus siglas en inglés). Las licencias al personal de riesgo se otorgan luego de pelearlas en la dirección del hospital, que impone muchas trabas en lugar de contratar mayor personal. Una situación terrible, por la cual también hacen oídos sordos, es la del personal tercerizado de seguridad de la cooperativa “Solucionar” LTDA, que al momento lleva 13 los empleados contagiados y ante estas ausencia, la jornada laboral de los que sí asisten asciende a 12 horas diarias, inclusive sin un día de descanso en la semana, siendo este uno de los sectores más afectados.
Ante las falacias del comité de crisis, la salida es con delegados por sector y comisiones de seguridad e higiene
Los comités de crisis están conformados por directivos de hospitales, que manejan la información sobre los contagios con total discreción. Además, el mensaje que brindan es que haya constante lavado de manos y mayor distanciamiento social en los espacios de descanso. ¿Acaso no saben que estos espacios son reducidos y que ni siquiera tienen ventilación? Tampoco se menciona la cantidad de testeos realizados a todo el personal del hospital, porque efectivamente no se están llevando a cabo. Inclusive, el mismo hospital cuenta con un laboratorio propio de virología.
Pero los trabajadores del hospital, ya demostraron que se organizan de manera independiente de las autoridades. Esto se vio en los sectores de rayos, resonancia magnética, camilleros, Neo y el CIM 74; donde se eligieron delegados por sector. Hoy es imperioso que todos los reclamos se puedan unificar, y que también se conformen comisiones de seguridad e higiene por los mismos trabajadores (y se consoliden donde ya existen) quienes mejor conocen cómo es el manejo hospitalario y las medidas adecuadas de cuidado que hay que tomar. Esto es algo que venimos insistiendo desde la Marrón en la Junta Interna ATE Garrahan, para organizarnos desde abajo con representantes por sector.
Mientras, los gremios de la CGT como UPCN y Sutecba, convalidan las rebajas salariales y están en cuarentena hace años, gremios como ATE se encuentra en la parálisis, debe romper la pasividad y ponerse a la altura de la situación que estamos viviendo los trabajadores. Es necesario confluir en una gran coordinación interhospitalaria que nos permita plantear de conjunto el plan de lucha necesario para garantizar el derecho a la salud.
Este miércoles 29 de julio, desde la junta interna del hospital, junto a la Asociación de profesionales y el régimen de insalubridad se convoca a una asamblea de todos los trabajadores, sean de planta, becarios y residentes, para que puedan participar, hacer oír sus reclamos y frenar los atropellos de las directivos con la organización mediante. Queremos que los niños pacientes del Garrahan tengan la mejor atención, pero hacerlo en las condiciones que nos corresponden, sin exponernos a los contagios. Es por esto que desde la Agrupación Marrón Clasista levantamos la consigna “Nuestras vidas importan” y nos parece urgente frente al colapso del sistema de salud, dado el pico de contagios, unificar el sistema de salud público y privado para no tener que llegar a decidir quién tiene acceso a una cama y a un respirador.
Por esto mismo además llamamos al resto de los agrupamientos de la izquierda, los sectores combativos y anti burocráticos, a organizar en común una gran asamblea nacional este 8 de agosto de los y las trabajadores de la salud, donde se expresen todos los sectores que están en lucha y los que se están organizando en sus lugares de trabajo. Para votar resoluciones de lucha y una movilización por todas nuestras demandas, para organizarnos por conquistar el derecho a la licencia para los trabajadores de la salud y que se escuche en todas partes un solo grito, en defensa del derecho a la salud y por la inmediata centralización de los recursos disponibles para que deje de ser un negocio.