Valentina Rodríguez
| Lic. en Trabajo Social | Redacción Zona Oeste Gran Buenos Aires
La Izquierda Diario charló con algunas de las pequeñas protagonistas de la enorme movilización a la intendencia que realizaron el viernes las familias de la toma de tierras en Guernica. "Pedimos que por favor no nos saquen", cuentan, mientras resisten el frío, el hambre y pelean por un lugar para vivir en el medio de la pandemia.
A pocos días de celebrarse el día de las infancias (o día del niño hasta hace poco), UNICEF dio a conocer cifrasmás que dolorosas: a fin de año habrá 8,3 millones de niñas y niños pobres en todo el país, un número que representa al 63% del total y que muestra un agravamiento de las condiciones actuales, en donde 7 de cada 10 menores ya son pobres en el Conurbano.
Respecto de los chicos y chicas que están en situación de pobreza extrema, es decir, indigencia la proyección es de 2,4 millones (18,7%). La medición de la pobreza infantil es por la zona donde los chicos viven, por lo que en los barrios populares superará este año el 92% mientras que en los otros barrios será del 62% (Unicef).
¿Pero qué significan en concreto estos números? Más allá del impacto que generan estas estadísticas, les niñes tienen rostros, voz y derechos.
En Guernica, partido de Presidente Perón, hay una toma de terrenos en la cuál estiman, que hay alrededor de 3 mil niños y niñas, que bajo los cartones y bolsas que componen las casillas de la toma, sueñan, en sus propias palabras, con una casa propia.
De la toma participan niños, niñas, adolescentes que se movilizaron junto al resto de sus familias el viernes 14 para ser recibidos por la intendenta Blanca Cantero del Frente de Todos. La respuesta del municipio (fueron recibidos por otros funcionarios), fue la de brindar asistencia alimentaria y sanitaria, nada más. Todo lo demás comenzando por el derecho a la vivienda parece tener que esperar para los niños de Guernica, “quédate en casa” no existe para ellos. De concretarse el desalojo quedarían en situación de calle.
Durante la movilización, en entrevista con La Izquierda Diario, ante la pregunta de por qué apoyaban la toma, un grupo de niñas decía con toda firmeza: “Porque queremos una casa propia”, “Queremos que nos dejen estar acá, que no nos saquen”.
El 7 de agosto el juez de Garantías Nro. 8 Martín Rizzo decretó el desalojo de estas tierras que están deshabitadas desde hace más de 40 años. Los niños y niñas de la toma están patrocinados legalmente por las abogadas Laura Taffetani y Carolina Vilchez, de la Gremial de Abogados, que basadas en Convención de los Derechos de niños, niñas y adolescentes, específicamente en el artículo 12, piden por el derecho de los chicos a ser oídos y que sus opiniones tengan peso a la hora de una resolución de la justicia, motivo por el cual en la Mesa de Entradas del Tribunal, dónde está la causa de la toma, entraron dibujos y papeles con las palabras de los chicos.
Las respuestas para los problemas del capitalismo que se agudizaron con el Covid 19 y que impactan fuertemente en sectores como las infancias y adolescencias, siguen siendo focalizadas y totalmente insuficientes. En el conurbano, muchos municipios no cuentan todavía con Consejos Locales de Promoción y Protección de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes ni políticas públicas que trabajen contra la vulneración de sus derechos, y los que si tienen Consejos u otros organismos, se encuentran trabajando con muchísimos límites en el marco de la pandemia, pero también por una cuestión histórica de falta de presupuesto, con una alta precarización de sus trabajadores que “no les dan las manos” para atender las demandas de miles de chicos en cada municipio.
Parece que atender cuestiones sobre las infancias a pesar de los duros datos de reconocidos organismos internacionales, no es importante para ningún intendente del Conurbano, que se desentienden cuando miles de niñes están o pueden quedar en la calle.
Por el derecho a la vivienda, a la educación, a la salud, a la alimentación, a ser oídos. Este día de las infancias, el mejor regalo es apoyar la lucha por ese pedacito de tierra para los pibes y pibas de Guernica.