Según los medios y voceros oficiales el principal motivo de contagios es por los encuentros sociales, que están prohibidos por un decreto presidencial y hacen eje en la responsabilidad individual. Pero de lo que nadie habla es de la responsabilidad empresarial en la pandemia, que inclumplen protocolos sanitarios y obligan a sus trabajadores a contagiarse y exponer sus vidas y las de sus familias.
¿Qué tiene para decir el gobierno de Omar Perotti y el Ministerio salud sobre los trabajadores y trabajadoras que se contagian en sus lugares de trabajo? En las fábricas de Rosario como en Electrolux, Bambi que ya hay 6 contagiados, en La Virginia que sus empleados salieron a reclamar testeos masivos ante los contagios o en Gemplast con el pedido desesperado del personal de difusión de su situación ante la nula implementación del protocolo ante 5 casos de covid positivos y cerca de 20 casos sospechosos de trabajadores con síntomas. Nada. Es una política consciente dejar correr a las patronales que buscan no perder un peso a costa de la salud y la vida de sus empleados y empleadas.
Hay 22 trabajadores de Acindar Villa Constitución que se encuentran aislados. Mientras tanto la fábrica continúa produciendo sin las medidas sanitarias necesarias para cuidar la salud de los trabajadores. La situación que se da en Acindar no solo se viene desarrollando en Siderar y otras fábricas de la zona como Motomel y el Puerto y la Municipalidad de San Nicolás sino que es lo que están viviendo miles de trabajadores en los establecimientos de todo el país, como venimos señalando en La Izquierda Diario desde el inicio de la pandemia.
A las multinacionales y grandes empresas de Villa Gobernador Galvez no les importa la vida de sus trabajadores y se empezaron a conocer casos en Unilever , Swift, Paladini y Metalsur que a los contagios se suman los despidos. Con la insistencia en que los focos de contagio son las reuniones, se elude que son los grandes conglomerados fabriles, las clínicas,hospitales, los supermercados, puertos y otros lugares de trabajo, donde el virus se expande sin que rija ningún protocolo y contra trabajadores y trabajadoras obligados a realizar sus tareas con mínimas, o ninguna, protección.
Situación semejante pasan las y los trabajadores del transporte público, que ademas de sufrir ataques al salario fueron ellos mismos los que tuvieron que garantizarse las condiciones de aislamiento y seguridad para poder trabajar al inicio de la pandemia. Ahora hay casos confirmados de covid-19 entre los choferes de la UTA Rosario son 5, 4 trabajadores de la línea 3 y del interurbano Monte Vera en la ciudad de Santa Fe.
Los supermercados se han convertido en otro foco de contagio y en base a hostigamento y persecusión por parte de supervisores hay muchos trabajadores que han sido “apretados” por haber difundido en sus redes sociales los contagios y la denuncia de la falta de respeto a las medidas de distanciamiento, desinfección y que no les dan los materiales de seguridad para trabajar. En La Gallega de Rosario se conocieron casos, tambien en Jumbo, Carrefour, y en el supermercado Kilgilman de Santa Fe. En Supermercados EBE, con sucursales en las localidades de Granadero Baigorria e Ibarlucea, se niega a otorgar las licencias correspondientes a las trabajadoras y trabajadores que se encuentran enfermos, en algunos casos con síntomas compatibles con coronavirus mostrando un total desprecio por la salud del personal.
El personal de salud en toda la provincia está atravesando esta pandemia sin paritarias, trabajando en negro y precarizados, y son las y los que están en la primera línea, a mediados de mes según datos del Ministerio de Salud de la Nación había más de 15.600 contagiados a nivel nacional y el 8% eran trabajadores de la salud de la provincia de Santa Fe.
En la ciudad de Coronda uno de los casos positivos es de una persona que trabaja en el Servicio Penintenciario y abre nuevamente el interrogante de la situación y las condiciones de las y los internos en las cárceles de Santa Fe, que desde el comienzo de la pandemia realizaron motines para pedir elementos de higiene y a finales de marzo hubo cinco muertos en penales santafesinos, en el marco del reclamo frente al coronavirus.
Desde la Izquierda Diario impulsamos junto al Movimiento de Agrupaciones Clasistas y las Red de Trabajadorxs Precarizadxs e Informales la campaña “las vidas trabajadoras importan”. Te invitamos a hacernos llegar tu denuncia, para no callar los que los principales medios silencian.
Mientras el Estado y el gobierno provincial han redactado protocolos para su aplicación en fábricas y establecimientos sin controlar ni inspeccionar la aplicación del mismo, dejando al arbitrio de las patronales esta aplicación, lo que termina predominando es el ritmo de producción, la pronta en marcha del funcionamiento a la máxima capacidad. Son los trabajadores, mediante las comisiones de seguridad e higiene quienes deben decidir y garantizar el cumplimiento estricto de los protocolos, el aislamiento y demás medidas recomendadas por los los organismos sanitarios del país y del mundo. |