El mismo es su a vez propietario junto a Raúl Vengrover de una gran parte de los locales ubicados en la misma manzana, donde existirán un taller clandestino de costura, un local nocturno donde se ejercía la explotación sexual de mujeres y un hotel alojamiento no habilitado, entre otros emprendimientos ubicados en esa manzana.
En cuanto al local donde funcionó República Cromañón, la propiedad estaba registrada a nombre de Nueva Zarelux, una sociedad off-shore radicada en Islas Vírgenes Británicas. La habilitación del comercio estaba en posesión del Hotel Central Park –también propiedad de Levy– y figuraba a nombre de otra empresa off shore, Lagarto S.A., que según el juez Baños también controlaba Levy.
Según los familiares de las víctimas, Levy fue el que dio la orden de trabar las salidas de emergencia, al tiempo que estaba involucrado en el pago de coimas a funcionarios y policías, que permitieron el funcionamiento del local con precarias condiciones de seguridad, pero había quedado impune del juicio oral.
Fue gracias a la lucha incansable en esta causa que se pudo revocar el sobreseimiento y procesar y condenar a Levy. Cabe destacar que el abogado de los familiares, Fernando Soto, confirmó que le pedirán al tribunal que disponga la inmediata detención de Levy ante el peligro de fuga del mismo. | 
