“En este gobierno, aunque la generalidad es muy mala, a diferencia de lo que dijo el presidente hoy, sostengo que tenemos el peor gobierno en el peor momento, pero hay gente valiosa dentro de éste y con ella tenemos que construir”; así se expresó el presidente del órgano empresarial con respecto a la gestión de gobierno de AMLO.
No resulta tan extraño escuchar estas palabras cuando este organismo ha sido uno de los que tácitamente ha encabezado no sólo la oposición al gobierno por derecha, sino que en escenarios electorales sistemáticamente se posicionó en contra del tabasqueño y a favor de personajes como Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto y Ricardo Anaya. Sin temor a aparecer como contrarios a todo, su mención diplomática a la "gente valiosa" en el gobierno no existiría de no ser por la existencia de gente proveniente de las entrañas del régimen y el reciclaje constante de funcionarios expriístas, expanistas y experredistas "arrepentidos" y acogidos en el seno del partido que dice ser "la esperanza de México".
“Lo que esperábamos los mexicanos es encontrar propuestas novedosas para enfrentar la crisis que enfrenta el país, pero estos temas estuvieron ausentes. El Informe pasó sin pena ni gloria y no implica un replanteamiento alguno, novedoso, que merezca un comentario mayor de lo que ya hemos venido escuchando de manera recurrente por el titular del Poder Ejecutivo Federal”, continuó.
Son fuertes palabras ahora que el personaje contra el cual hicieron campaña ocupa la silla presidencial, sin tomar en cuenta que los informes de Peña Nieto y sus discursos tampoco expresaban propuestas novedosas, sino recetas dictadas desde la Casa Blanca; ¿o es que ya olvidaron las miles de pifias del mexiquense, entre las cuales destaca el "ya sé que no aplauden"?
Sobre la situación económica, Hoyos dijo que "no podemos conformarnos con una recuperación de 93 mil empleos en agosto, ya que éstos solo representan el 8% de los trabajos perdidos durante la pandemia”. Y es verdad que no son suficientes, pero dicha situación no sería posible sin la connivencia de los sectores empresariales que también despiden en masa, como si López Obrador fuera el único responsable de la oleada de despidos que se detonó con la cuarentena.
Las declaraciones de Hoyos y la COPARMEX se dan como consecuencia no sólo del segundo informe presidencial, sino también por la caída mundial de la economía, de la cual nuestro país no es inmune al ser dependiente de las cadenas de valor que se instauraron en la década de los 90 con la industria maquiladora. Lo que reflejan es solamente el hecho de que estos sectores no pueden hacer business as usual, lo cual se refleja en que, a pesar de situarse políticamente en la oposición, tanto ellos como López Obrador y Trump tienen acuerdo en profundizar la dependencia de México hacia Estados Unidos, como se pudo ver en su visión favorable de la visita de AMLO a Estados Unidos.
En aquel entonces, declaró que: "me parece que es una decisión política fundamental que tenemos que celebrar en nuestro país y celebrar la continuidad en estas decisiones esenciales para la vida pública. [...] Más allá de los apasionamientos partidarios, en temas sensibles y trascendentes para la vida del país se mantengan siempre en el servicio de los intereses esenciales".
Ya en otra ocasión también aprovechó para hacer declaraciones contra la administración obradorista, a la que calificó de "irracional", en junio pasado en un encuentro empresarial en el cual estaba nada menos que el rey Felipe VI de España, como si se tratara de tiempos virreinales y se fuera a rendir pleistesía a "Su Majestad".
Ciertamente el gobierno de López Obrador no ha tomado decisiones correctas ni en favor de los trabajadores, entre las cuales están los despidos del sector estatal (DIF, NOTIMEX, varias universidades y centros educativos), los recortes de presupuesto y los programas como Jóvenes Construyendo el Futuro que precarizan a miles de jóvenes que buscan empleo y que lo encuentran en dicha modalidad que reduce sus prestaciones a comparación de los trabajadores a los que reemplazan.
Sin embargo, sería ingenuo creer que de la mano de este organismo se puede hallar una solución que beneficie la economía del país. A pesar de ser los "dueños" de las miles de empresas que existen en el país, lo que la pandemia ha reflejado es que sin los trabajadores, estos empresarios y sus compañías no pueden subsistir; su salida para la crisis y la recuperación económica pasa necesariamente por continuar con las condiciones de trabajo que a lo largo de los años han sido la norma, y cuya situación se caracteriza por la subcontratación, los bajos salarios y la falta de regulaciones, todas herencias de las reformas estructurales de Calderón y Peña Nieto que López Obrador jamás osó tocar.
Por ello es necesario que los trabajadores y jóvenes nutramos iniciativas como el Movimiento Nacional contra la Precarización Laboral y los Despidos que enfrente no sólo a las políticas antiobreras del gobierno de López Obrador, sino también a las de estos empresarios que viven sus vidas a costa de las de miles que todos los días arriesgan su salud haciendo que sus empresas sigan generándoles cuantiosas ganancias mientras el resto se tiene que conformar —como señala la OCDE— con los salarios más bajos a cambio de largas horas de trabajo. | 
