Este jueves Alberto Fernández, Horacio Rodríguez Larreta y Axel Kicillof se reunieron en Olivos para definir las nuevas medidas en relación a la cuarentena por el Covid-19 en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
Según trascendió, el anuncio oficial sobre la nueva fase del aislamiento social obligatorio sería este viernes, pero ya se sabe que el gobierno porteño logró la aceptación de sus interlocutores de Nación y de la provincia de Buenos Aires para habilitar patios y terrazas de bares y restoranes. También que se permita terminar obras en construcción que estén a menos de 90 días de concluir.
La reunión se produjo el mismo día en que se registró un nuevo récord de 12.701 contagios y 345 muertes. Durante dos horas los mandatarios se reunieron a solas y ultimaron los detalles para la redacción del nuevo DNU que extenderá la cuarentena en el AMBA luego del domingo y durante tres semanas.
Hasta ahora lo que también está confirmado es que no habrá comunicado conjunto (como los que hicieron hasta hace un mes los tres gobernantes), sino que cada distrito lo comunicará por separado y a su vez a través de las redes sociales la Casa Rosada informará los alcances generales del nuevo decreto.
Fuentes oficiales aseguraron que no habrá cambios sustanciales en lo que respecta al nivel de aperturas y permisos para circular, transitar y realizar actividades públicas y privadas. Solo habrá habilitaciones puntuales.
La de ayer fue la primera vez que el Presidente, el gobernador bonaerense y el jefe de Gobierno porteño se encontraron luego de que Alberto Fernández anunciara el recorte de fondos de coparticipación que la Nación le da a la Ciudad desde la presidencia de Macri. Hasta entonces, los casi “amigos” mantenían un diálogo más que fluido y hasta realizaban las conferencias de prensa en común.
Desde la Casa Rosada dijeron que la reunión privada entre Rodríguez Larreta y Fernández fue “positiva”, y que pudieron “avanzar”. Pero desde la Ciudad dijeron que “fue una charla de unos minutos en la que Horacio le reconfirmó que el viernes hará sus presentaciones en la Corte Suprema”. Como sea, el mandatario porteño consiguió bastante de lo que pretendía, como las aperturas de locales gastronómicos y de obras en construcción que venía pidiendo. Larreta también pidió la habilitación de clases presenciales en lugares abiertos y públicos para un total de 6.500 estudiantes que, según los datos oficiales, no pudieron continuar con su escolaridad. Sobre eso, por el momento, no hubo definiciones. | 
