El Frente de Izquierda, junto a trabajadores de salud, proponen unificar los subsistemas público, privado y de obras sociales bajo la órbita estatal para enfrentar el peor momento de la pandemia y garantizar el derecho universal a la salud de toda la población.
El sistema público de salud de Neuquén está al borde del colapso. "Estamos en el peor momento", aseguró la secretaria gremial del Sindicato de Profesionales de la Salud de Neuquén, Noemi Alemany y advirtió que el recurso humano ya no da abasto. “El 80% del personal está saturado y sobrecargado”. En la última semana, se registraron casi trescientos casos positivos por día y el lunes se registraron 12 muertes, el más alto desde que comenzó la pandemia.
El mismo director del hospital Castro Rendón, Dr. Adrián Lammel reconoció que hay un 95% de camas ocupadas de terapia intensiva y dijo que de seguir este nivel de contagios “en 15 días vamos a estar totalmente desbordados”.
Ante esta situación el Frente de Izquierda propone la centralización del sistema de salud, público, privado y de las obras sociales. “Esta medida permitiría centralizar, bajo la órbita del Estado pero con el control de los propios trabajadores y trabajadoras de la salud y la comunidad, todos los recursos disponibles”, explicó Blanco.
Insistió que no se puede dar una respuesta a la altura de la situación sanitaria que atraviesa hoy la provincia “sin tocar un peso de las ganancias de los grandes empresarios de las clínicas privadas, de los laboratorios, farmacéuticas y prepagas. Si se toman medidas de fondo, si se tocan los intereses de los que más ganan, se puede luchar contra la pandemia”.
Por su parte, la referente de la secretaría de las mujeres del hospital Castro Rendón, Julieta Katcoff señaló que “con un promedio de más de 200 contagios por día, el personal agotado, una ocupación de camas de terapia intensiva de casi el 100% y la transmisión comunitaria en las principales ciudades de la provincia, el Gobierno tiene la obligación de tomar medidas de fondo para llevar tranquilidad a la población”.
Explicó que hay preocupación en la población. Hay temor por el aumento de los contagios y temor a no tener una cama en el hospital. “Dar tranquilidad a la población no significa mentir y decir que el sistema está perfecto y que vamos a poder hacer frente al aumento de casos, como dijo el gobernador. Significa poner todos los recursos a disposición para garantizar el derecho a una atención de calidad a toda la población, y que ninguna persona se quede sin poder acceder a una cama o un respirador”.
La concejala Natalia Hormazabal también llevará el debate al Concejo Deliberante, aseguró que la medida de centralización del sistema de salud que plantean, parte de definir “la salud como un derecho, y no como una mercancía”. En este sentido, si la salud es un derecho universal que el Estado debe garantizar, no puede dejar la salud de la población en manos del criterio del empresarios, que lo único que buscan es la obtención de ganancias atentando contra con la salud de quienes no pueden acceder a la misma”.