En la mañana de este jueves trabajadores y trabajadoras del hospital Tornú realizaron una jornada de visibilización en la puerta de la institución contra la violencia y agresiones que vienen sufriendo los residentes y concurrentes. En particular repudiaron y exigieron que se tomen medidas frente a una agresión que sufrió una residente del sector de terapia intensiva por parte de un médico de planta.
Además los trabajadores y trabajadoras denunciaron el rol de las autoridades, sobre todo las de la Unidad de Terapia Intensiva que fue parte de las agresiones. Desde que fue denunciado el hecho con un comunicado emitido por la Asamblea de Residentes y Concurrentes del hospital el 9 de septiembre, no hubo respuestas desde las autoridades. Actualmente se quiere sacar a los residentes de UTI del hospital.
María Laura Díaz, Jefa de Residentes del hospital elegida por sus compañeros, nos relataba que: “hubo violencia física y psicológica por parte de un médico del servicio, apañado por el jefe de servicio, que también fue cómplice. Hoy a dos meses de esa agresión no tenemos respuesta de la Dirección. Hace caso omiso a todas las denuncias que hicimos en la fiscalía, defensoría, INADI y también internamente”.
Además agregó que “el miércoles que viene se termina mi contrato de residente de cuarto año en el hospital, y hasta el día de hoy el Director se niega a firmar los papeles de la jefatura, siendo que ya ha firmado los papeles de la jefatura de todos los demás jefes electos de residentes”.
Dolores García, trabajadora social del hospital, contó que la medida de hoy fue contra los hechos de violencia sufridos, pero también contra la re victimización sufrida por la residente: “A partir del hecho, en vez de apartar a los violentos de la Unidad de Terapia Intensiva lo que hicieron fueron revictimizar tanto a ella y a todos los residentes de la UTI, porque la respuesta fue sacarlos del hospital. Así que apoyamos la medida para una reparación rápida a esta situación y no solo por este hecho, sino para que nunca más haya violencia en el hospital y para que haya un protocolo claro que separe a los violentos y proteja a las víctimas”.
Además se convocó al paro de enfermería del 1 de Octubre por la represión que sufrieron las enfermeras y enfermeros en la Legislatura porteña el pasado lunes, mientras que siguen sin reconocerlos como trabajadores de la salud y siguen sin aumentarle el salario. |