Ayer, jueves 24 de septiembre, en el reporte diario sobre el Covid-19, el MINSAL dio a conocer el número de 124 personas fallecidas en las últimas 24 horas; la cifra más alta desde el peak de la pandemia en julio.
Durante estos últimos días informaron de una serie de ciudades que saldrán de cuarentena, aludiendo que han bajado la cantidad de contagios, sin tomar en cuenta que otras ciudades o comunas que han pasado a fase dos anteriormente, hoy vienen presentando rebrotes, o incluso otros países que han seguido la misma estrategia que vienen tomando en Chile, han presentado grandes índices de contagio.
Natalia Sánchez, médico del Hospital Regional de Antofagasta comentó lo siguiente:
"considero que hay que partir por pensar la situación de la pandemia de forma global. En Chile, como en Latinoamérica, hay un sistema público de salud desmantelado, y eso significó que no fuese capaz de responder, pues no había suficiente preparación para enfrentar la pandemia del coronavirus. Además, la política sanitaria del Gobierno fue un fracaso, se mantuvo a millones de personas trabajando, yendo a laborar en sectores no esenciales para la población, sin asegurar el pago íntegro de sus sueldos para que se pudiesen así quedar en sus casas protegidos del virus; y quienes por ser de población de riesgo se quedaron en casa, no obtuvieron el control y tratamiento adecuado. Con esto apunto a que hoy día los pacientes que ocupan las camas críticas en el país son aquellas patologías descompensadas, que de forma simultánea pueden estar cursando una infección por el nuevo coronavirus. Esto lo digo porque creo que es necesario ser críticos del accionar de Gobierno frente a la pandemia".
Sabemos que a este gobierno no le interesa nuestras vidas, lo primordial para ellos es seguir moviendo la economía, asegurando las ganancias de los grandes empresarios. Por eso, es urgente una respuesta desde la clase trabajadora, que pueda dar solución a la crisis sociosanitaria y al problema del empleo, garantizando todos los implementos médicos para enfrentar la pandemia, la prohibición de los despidos, un sueldo mínimo de 500 mil pesos, de acuerdo a la canasta familiar básica, entre otras reivindicaciones. |
