En todo el tiempo transcurrido por la pandemia uno de los gremios más invisibilizados y olvidados por el gobierno capitalino ha sido el artístico-cultural. A comienzos de ésta se prometieron muchos apoyos directos hacia el sector, aunque la realidad dista mucho del discurso y los trabajadores del arte y la cultura no han visto consecución en su confianza de votar por MORENA y que este partido vea por sus intereses.
Con base en discusiones, diversas organizaciones conformaron la Iniciativa de ley, una de ellas es No Vivimos del Aplauso (NVDA), quienes desde hace dos años forman parte de la comunidad preocupada por el sostenimiento y propagación de los ECI y autogestivos y la divulgación a diferentes escalas del arte y la cultura.
La Iniciativa urge que se apruebe, ya que otorgaría certeza jurídica a los más de 200 espacios culturales a fin de no estar catalogados como bares y antros, de no ser así las alcaldías los seguirán clausurando al carecer de esa figura jurídica.
La diputada por MORENA, Gabriela Osorio, aseveró respecto a la iniciativa, que cada espacio cultural contará con autonomía de gestión y organización interna, y podrá solicitar permisos para venta y consumo ocasional de alimentos, así como gozar de la exención del impuesto sobre espectáculos públicos, pero al parecer no contaba con el revés de los otros diputados del pleno del Congreso de la CDMX quienes, según la organización que ha seguido de cerca el proceso NVDA, pretenden discutirla el jueves y así argumentar que por reglamento debió discutirse en sesión, no a destiempo, lo que daría como resultado apretar más la soga al cuello de dichos espacios.
Para las autoridades la reapertura podrá ser una salida de fondo, sin embargo, como la han argumentado las organizaciones artísticas y culturales que viven la crisis, no es para nada todo lo que necesitan para salir del hambre que padecen, porque más allá de sólo mostrar potencial, creatividad, expresiones y producción artística en las redes y la TV, es primordial apoyar económicamente al sector si no habrá en corto plazo la reactivación total. No dejemos de lado algo que tanto han recalcado los creadores y trabajadores del sector, las principales fuentes de ingreso, como en la mayoría de los espacios escénicos, son la venta de boletos en taquilla y la renta del foro a otras agrupaciones.
Extendemos la invitación a creadores, promotores y trabajadores y trabajadoras que han defendido los espacios culturales independientes frente al embate inmobiliario y los recortes presupuestales, a acordar un plan de lucha junto con otras organizaciones como Clavería 22, NVDA o RECIO (Red de Espacios Culturales Independientes y Organizados) para arrancar no sólo la iniciativa de ley que servirá a los ECI, sino para imponer nuestras demandas a fin de acabar con las pésimas condiciones a las que nos han orillado las actuales administraciones.
Les invitamos a conocer y formar parte del Movimiento Nacional contra la Precarización y los Despidos para luchar en conjunto y demostrarnos la fuerza que tenemos como sector, porque la crisis capitalista no la tenemos porqué pagar. |
