Según la Ley el Salario Mínimo Vital y Movil (SMVyM) debería garantizar "alimentación adecuada, vivienda digna, educación, vestuario, asistencia sanitaria, transporte/ esparcimiento, vacaciones y previsión”. Para una familia tipo serían necesarios al menos $ 72.000 si tomamos los cálculos de la Junta Interna-Ate Indec, un abismo separa a esa cifra de los $18.900 acordados este miércoles entre los sindicatos, empresarios y el Gobierno.
El acuerdo implica subas no acumulativas del salario mínimo de un 12 % en octubre, un 10 % en diciembre y un 6 % en marzo cuando llegará a $21.600, el Gobierno de Macri lo había dejado en $16.875. Con estas cifras el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, convalidó una caída del 9 % anual en relación a la inflación y un retroceso a valores no vistos desde el 2004. Dando continuidad así a la caída comenzada en 2012 y profundizada a partir del 2017 por la gestión de Cambiemos.
El acuerdo fue oficializado por el Consejo Nacional del Salario (CNS) presidido por Moroni y del que participaron Héctor Daer por la CGT y Hugo Yasky por la CTA. Estos últimos en sus declaraciones marcaban que el SMVyM debía llegar a los $45.000 para cubrir el costo de la canasta básica informada por el Indec para el mes de agosto. Pero quedó sólo en palabras, la propuesta inicial de su parte era de sólo un 40% de aumento y lo firmado partió de una iniciativa de los jefes sindicales. Recordemos que vienen de aceptar las suspensiones con una rebaja del 25 % de los salarios y paritarias con un aumentos muy por debajo de la inflación.
El salario mínimo, vital y móvil repercute en el piso de las remuneraciones de los docentes, que deben ser un 20% superior al mismo. También en la jubilación mínima de los adultos mayores con 30 años de aportes, cuyo haber es el 82% de dicho ingreso impuesto por la reforma previsional de 2017. Por último también afecta a las asignaciones de los beneficiarios del programa Potenciar Trabajo, que perciben la mitad del mínimo. De conjunto funciona como un ancla que presiona hacia abajo los ingresos de los que menos tienen.
Por el empresariado estuvieron presentes en la reunión virtual la Unión Industrial Argentina (UIA), la Cámara Argentina de Comercio (CAC), la Cámara de la Construcción (CAMARCO) y las principales entidades del agro.
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