A través de su cuenta de Twitter, el magistrado de la sala superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), José Luis Vargas Valdez, señaló que, partiendo del expediente SUP-RAP-56/2020 que tiene la solicitud de la asociación civil Libertad y Responsabilidad Democrática de convertirse en partido político, que dicha organización "no acreditó el origen de las aportaciones en dinero que recibió de supuestos simpatizantes" y que "el derecho de asociación de sus afiliados se vio afectado por las irregularidades sistemáticas cometidas por la misma organización, que no fueron subsanadas ante el INE durante el proceso de revisión de sus ingresos y egresos para la obtención de su registro".
Dicha postura refrenda aquella que tomara el INE —si bien Vargas Valdez enfatizó en que "no acompaña las consideraciones" que el órgano autónomo tuvo para denegar el registro de México Libre— acerca de la falta de transparencia que tuvo la A.C. encabezada por los Calderón-Zavala. En los parámetros del INE, México Libre incurrió en fraude debido a que no pudo comprobar de dónde obtenía sus ingresos, ya que éstos eran filtrados a través de la aplicación Clip, la cual no permite que se conozcan los aportantes.
Frente a ello, diversas personalidades tuvieron declaraciones, empezando por el ya mencionado matrimonio de expanistas, quienes dijeron en sus redes sociales que “pedimos al resto de los Magistrados y Magistradas que tomen en cuenta los argumentos de nuestros agravios, tenemos la razón y el derecho". También hacia ello se refirió el presidente de la COPARMEX, Gustavo De Hoyos Walther, quien declaró en su cuenta de Twitter que "el TEPJF tiene la responsabilidad de resolver con estricto apego a la legalidad y rechazado cualquier presión gubernamental, la impugnación a la resolución del Consejo General del INE, que negó el registro a partidos como México Libre, Fundación Alternativa y otros".
Sobre ello, el presidente se refirió en su conferencia matutina a la decisión del INE y el TEPJF declarando que él y su partido "se mantuvieron al margen" en lo que respecta a darle o no el registro a la asociación civil de los Calderón Zavala. Ello porque entre los sectores de derecha está la acusación de que López Obrador estaría actuando tras bambalinas para presionar a los funcionarios para que le nieguen el registro a México Libre, presuntamente como venganza por el fraude de 2006 cuando tanto López Obrador como Calderón contendieron a la presidencia y donde el segundo habría sido declarado ganador.
Pero el esquema con el cual México Libre busca el registro muestra las irregularidades de este tipo de organizaciones. Con un programa ultra-conservador y fuerte retórica contra López Obrador, la estrategia de México Libre de buscar ser una voz de sectores sobre todo clasemedieros (incluso esa imagen siguen intentando llevar Calderón y Zavala, como un matrimonio de padres profesionistas y socialmente moderados) enmascara las usuales maneras en que las organizaciones de derecha buscan beneficiarse de sus afiliados en los procesos tanto de aprobación de legalidad como con el otorgamiento de dinero del erario —un fuerte contraste con las organizaciones de izquierda obrera que a duras penas pueden lograr autofinanciarse y son sistemáticamente proscritas del proceso político y de los espacios de toma de decisiones.
La insistencia de que México Libre sea partido es también una forma en que el régimen muestra su faceta de qué tan restrictivo es el proceso para conformar un partido en este país, si bien en este caso dicha organización fungiría como un negocio —y sin lugar a dudas un alfil del FRENAAA— más que como un partido de ciudadanos genuinamente preocupados por el bienestar de México (que es el discurso que usualmente emplean los partidos al servicio de los empresarios para camuflar sus políticas capitalistas en desmedro de las mayorías trabajadoras).
Pero en vez de cuestionar el aparato y las leyes extremadamente restrictivas que impiden el acceso y la participación de los ciudadanos de a pie, los trabajadores y pueblo pobre en los espacios de decisión política, en vez de cuestionar al INE que ha avalado procesos fraudulentos en las elecciones, evidentemente que los adherentes a México Libre y sus amigos van a poner el eje más en presionar a las instituciones de este régimen corrupto. No esperan que se conformen otro tipo de organizaciones políticas que propongan una alternativa a todo el sistema, en especial si en el proceso se ponen en cuestión también sus privilegios y altas ganancias. Algo muy alejado de quienes tenemos que soportar el riesgo de contraer COVID en el transporte público y las calles. | 
