En una jornada que comenzó con un paro por tiempo indeterminado, trabajadores y trabajadoras de los distintos centros de salud concentraron hoy en las puertas de la Municipalidad junto a Si.Pru.S y acompañados por Amsafe Rosario y organizaciones sociales que se solidarizaron con el reclamo de aumento salarial y mejores condiciones laborales para quienes se encuentran en la primer línea de atención ante la crisis sanitaria.
La pandemia puso a la luz las condiciones en las que debe atender el personal de la salud que se encuentra expuesta al contagio trabajando bajo condiciones laborales de precarización. No sólo reclaman que no perciben aumento salarial desde hace un más de un año, sino que denuncian también que desde hace años trabajan en negro o bajo monotributo sin plenos derechos laborales. Una postal que se repite en muchos efectores de salud en Santa Fe, ya sean municipales o provinciales. Pero la falta de recursos y las pésimas condiciones laborales afectan no sólo a sus trabajadores sino también la atención de los usuarios, en su mayoría de los sectores populares, y a quienes la crisis sanitaria y económica viene golpeando más duramente.
Ante el reclamo la respuesta de Alberto Ricci son amenazas de despedir a todos los trabajadores si no aceptan un mísero 25 % de aumento y sin ninguna modificación sobre las condiciones de contratación. Parece que en la ciudad dónde empresas como Cargill, Unilever, Paladini o Swift que hacen fortunas todos los meses es impensado que quienes se ponen al hombro día a día la salud pública puedan hacerlo en condiciones dignas, mostrando que la salud para el Intendente no es prioridad.
Los centros de salud en Rosario también van al paro
En la jornada además se adelantó que el próximo miércoles trabajadores de los centros de salud de Rosario también irán al paro.
Diego Ainsuaín, presidente de SiPrUS, declaró: "La demanda creció muchísimo, muchos compañeros están obligados a hacer aislamiento y muchos centros de salud han quedado en distintos momentos sin personal de limpieza, sin médicos y médicas, por lo cual hay turnos enteros que cierran. A esto se suma la falta de elementos de protección personal pero también cuestiones básicas como artículos de limpieza o medicamentos. Es por esto que trabajadores de atención primaria definieron un paro de 24 horas y una caravana el próximo miércoles".
Ante el colapso sanitario y el agravamiento de las condiciones de vida se vuelve necesaria la pelea común del conjunto de los trabajadores de la salud, organizando asambleas en cada efector de salud para impulsar acciones comunes junto a usuarios y el resto de los trabajadores y sectores que hoy pelean por condiciones laborales o derechos elementales como la vivienda, para que la crisis no la paguen los trabajadores y los sectores populares. |