El hecho tuvo lugar luego de que las asambleas de los diecinueve departamentos judiciales decidieran por unanimidad ratificar el rechazo de la propuesta salarial de un 23 porciento por ser insuficiente, y convocar a una nueva medida de fuerza.
Ante esta convocatoria a paro, desde el Gobierno decidieron retomar la negociación salarial con los trabajadores judiciales, el próximo viernes 23 de octubre. Por su parte, la conducción de la Asociación Judicial Bonaerense, que el día lunes había comunicado que se realizaría la medida de fuerza el jueves 22, resolvió suspenderla y continuar la negociación salarial con el Gobierno.
Hablamos con Mauro Mena, integrante de la agrupación La Marrón Clasista en judiciales, quien sostuvo:
“Desde el mes de mayo estamos peleando por las paritarias, luego de que el Gobierno incumplió con retomar las reuniones. Después de ceder ante el chantaje de la Policía bonaerense es que nos vuelven a citar a los trabajadores judiciales. Los ofrecimientos que nos hicieron son todos por debajo de la inflación y quienes adhirieron al teletrabajo siguen poniendo de su bolsillo los gastos para sostenerlo. Con estas propuestas hay trabajadores judiciales por debajo de la línea de pobreza”.
Luego agrego:
“La conducción del sindicato levantó el paro votado en asambleas y deposita su confianza en el Gobierno que nos ningunea desde mayo y realiza ofertas por debajo de la inflación. Nosotros entendemos que no se debería haber suspendido una medida de fuerza que ya había sido discutida en las asambleas por las y los trabajadores”.
Por último, planteó:
“El sindicato no debe conceder ninguna tregua al Gobierno ni a la corte. Son quienes mantienen la tercerización y precarización laboral, con salarios por debajo de la línea de pobreza, y quienes están a favor de desalojar a las familias en Guernica que no tienen dónde vivir. Por eso las y los trabajadores judiciales tenemos que discutir en las asambleas un plan de lucha para que el ajuste no recaiga sobre nuestras espaldas y lo paguemos de nuestros bolsillos. Ningún trabajador bajo la línea de pobreza”. |