En la Plaza de Armas de Santiago se reunieron madres, hermanos, hermanas, familiares, agrupaciones en lucha por la libertad de las y los presos políticos, y amigos y amigas de algunos recluidos desde el 2019 tras la rebelión popular en Chile. Son más de 2.500 las y los jóvenes procesados y 600 quienes están privados de libertad, un porcentaje importante, donde muchos de esos casos se sostienen a partir de testimonios de la policía, la misma de los grandes desfalcos, montajes hacia el pueblo-nación mapuche, y culpable de muertes, mutilaciones, tortura, violaciones y vulneraciones a los Derechos Humanos en el contexto de la rebelión popular.
El acto realizado no estuvo exento de hostigamiento por parte de la policía, que procedió a realizar controles de identidad sin presunción de delito.
Mientras bajo la mirada atenta de quienes transitaban por el sector, las y los familiares daban cuenta de los casos y la situación que viven muchos de las y los presos.
El proceso constituyente actual es un pacto que oculta las muertes, mutilaciones, torturas, junto con dejar en el olvido a cientos de personas detenidas sin mayores pruebas que la versión de la policía experta en montajes. Además mantiene en la impunidad a los responsables políticos: Piñera, Rozas, Blumel, Chadwick, y los responsables materiales de todos los casos anteriormente nombrados. Por eso, desde el Comando por una Asamblea Constituyente Libre y Soberana hacemos el llamado a luchar por una alternativa que no deje en la impunidad las vulneraciones a los derechos humanos y no olvide a los cientos de presos políticos encarcelados sin mas pruebas que la versión de policías. |