ID: ¿Qué situación hay ahora mismo en los hospitales, frente a la segunda oleada que parece que como mínimo está llegando a picos máximos o parecidos a la de la primera oleada de marzo y abril?
Alberto: Yo puedo informar ahora mismo de la situación de mi centro, Bellvitge, donde se puede decir que en este momento que estamos ahora no tiene que ver la primera oleada, el nivel de ingresos no es ni mucho menos el que hubo en marzo ni en planta ni en las ucis, si bien es cierto que no se puede bajar la guardia porque en cualquier momento hay un repunte de contagios y de casos y se puede colapsar el hospital de nuevo.
ID: No estamos como en marzo pero especialmente en el tema de los ingresos que aún no se ha llegado al colapso de camas, pero como adviertes si se baja la guardia se puede llegar a números como los de marzo. Después de superar el pico más fuerte en abril se insistió mucho en reforzar en sanidad pública que ha vivido muchos recortes desde hace años, especialmente en la última década. Hubo consejos interterritoriales semanalmente impulsados por el Gobierno con las diferentes consejerías de sanidad, muchísimas opiniones y decisiones políticas y me gustaría saber cómo valoras.
A: Como ciudadano y trabajador de la sanidad yo creo que la mayoría de la población percibió que en los peores meses de pandemia ha habido descoordinación a nivel de los políticos, el Ministerio y las autonomías no se han coordinado como deberían, el caso más claro es el de Madrid, ahora que están con una guerra política jugando con la salud de la ciudadanía. Y es un poco lo que pasó en estado de alarma, aquí en Catalunya ya sabes lo que decía el ministro Illa, Torra siempre le contradecía y cuando el ministro decía otra cosa Torra le volvía a contradecir. Con lo que era antes hacerse la zancadilla que ponerse de acuerdo, no ha habido una dirección clara. Cada autonomía empezó a tomar sus decisiones.
ID: ¿Y en materia de infraestructuras y personal habéis notado la partida de sanidad?
A: Personal sí que es verdad que se dotó de mucho personal en los momentos más importantes, en el caso nuestro de celadores, pasó de una semana para otra, incluso en Catalunya se están construyendo 5 módulos, como en Bellvitge, para esta segunda oleada. No obstante los refuerzos se eliminaron de un día para otro, tendrían que haberlos mantenido o al menos reducido paulatinamente. Ahora por ejemplo, se están abriendo UCIs nuevas, se está aumentando la actividad y no se está contratando o muy poco, lo justo yo creo que son insuficientes. Por eso en el hospital hemos convocado huelga de celadores, se ha desconvocado porque se pactó con la dirección unas medidas que han incumplido totalmente, así que en las próximas semanas reactivamos la asamblea y votaremos si convocar huelga, porque la percepción es esta, que no hay recursos.
ID: Trabajando en el sector de la sanidad, una pregunta obligatoria es ¿por qué consideras que en el Estado español el país con mayor número de personal sanitario contagiado a nivel proporcional?
A: Claro, sí, bueno por lo que te comentaba que he vivido en primera línea y la descoordinación política, no se han tomado las medidas a tiempo, cuando se han tomado han sido tardías, cuando ya el virus estaba totalmente propagado el avalancha de usuarios nos arrasó , falta de material evidente, falta de PCR, falta de rastreadores evidente, falta de recursos, falta de personal… Recuerdo que la gente se encontraba mal, tenía síntomas pero no les hacían la PCR y le decían que tenían que seguir trabajando o te salía negativa la PCR pero tenías síntomas y en lugar de repetirla o hacer la cuarentena te decían a trabajar.
Yo creo que ha habido un pacto político de silencio, no escrito, de salvar la temporada turística evidentemente y al final ni se ha salvado por que no hemos ido de vacaciones o no hemos gastado o no han venido y encima se ha malbaratado lo que se consiguió en el confinamiento porque han vuelto los contagios.
ID: Formas parte de una plataforma estatal de celadores. Me gustaría saber cómo surgió esa necesidad de organización, cuáles son vuestras reivindicaciones y también si quieres explicar cuál es el trabajo de un celador en el hospital.
A: A modo resumen se puede decir que la pandemia o covid19 ha sido el punto de inflexión de esta profesión, el punto clave fue cuando el Gobierno, el Ministerio de Salud concretamente, emitió un documento orientativo para los servicios de prevención de los centros sanitarios y en ese documento hace una tabla en la que cataloga los niveles de riesgo según la exposición al covid, máximo riesgo, bajo riesgo y muy poco riesgo y entonces nuestra profesión de celador o celadora la cataloga de bajo riesgo. No entendemos por qué lo hicieron o en qué se basaron pero el tema está que catalogarnos de bajo riesgo en los centros sanitarios sobretodo antes la falta de epis en los momentos más duros es a los que se han acogido la mayoría de mandos intermedios para decirte que no te dan la protección o EPIs necesarios lo que supone un grave riesgo para nuestra salud y la de los pacientes.
Es decir, como oficialmente no teníamos riesgo de contagio con los pacientes, pues no se estaban haciendo en los centros de sanidad o en los centros de salud no se les daba el acceso a los celadores y celadoras a las PCR’s con lo que encima de estar trabajando sin protecciones con el riesgo de contagios que era super evidente, pudiendo contagiar a los usuarios no te hacían las PCR escusandose en ese bajo riesgo catalogado por el Ministerio de Sanidad.
ID: ¿Podrías nombrar las diferencias que habría entre un personal reconocido de alto riesgo y uno de bajo riesgo como los catalogó el Gobierno?
A: Te pongo el ejemplo más claro vivido en primera persona. Yo soy celador de urgencias por la noche, en la puerta de urgencias, cuando los pacientes venían muy afectados por el virus, venían en su coche, o venían en un taxi, una ambulancia, yo soy el que los recoge del coche, que los abrazas prácticamente y los sientas en una silla o de la silla los tienes que tumbar a una camilla. Es decir, hay contacto directo y estrecho con el paciente, estás pegado cuerpo a cuerpo prácticamente. Pues nosotros haciendo este trabajo no nos querían dar trajes EPI ni impermeables, ni mascarillas fpp2. Sin embargo, el otro personal sanitario que el gobierno no dijo ni que eran de alto riesgo ni de bajo, simplemente puso que ese personal que estaba en contacto con covid. A nosotros en muchos centros nos las han denegado por no salir en el documento.
ID: ¿Nos podrías contar un poco más la estructura de la plataforma de los celadores?
La plataforma se organiza mediante la redes sociales, tenemos el grupo de facebook siempre nos podéis encontrar en “reconocimiento para el celador ya” en la cuenta de instagram, youtube y telegram. Entonces a partir de las redes sociales hacemos difusión de materiales, concentraciones, a los escritos, acciones ,etc . Nos organizamos por grupos de whatsapps, hay uno de redes sociales, de portavoces de comunidades autónomas, donde se da la info importante y donde se organizan las reuniones online y allí se hace les da la info a los enlaces de cada hospital y luego hay otro de enlaces con cada comunidad, donde hay un enlace por cada hospital que se ha adherido a la plataforma. Entonces desde ahí se avisa a los trabajadores del hospital, cuando va a haber concentración, mirad que hemos conseguido que nos saquen del perfil de bajo riesgo digamos que es una organización jerárquica pero democrática porque el portavoz no es que diga lo que quiera sino que antes se la han pasado los enlaces, el orden del día, opiniones, se supone que hacen una asamblea en cada hospital, hacer votaciones y entonces esa información se le transmiten al portavoz en su comunidad. Es más o menos la organización o la estructura en la plataforma.
ID: Ante la actual situación, ¿qué demandas defendéis?
A: Pues actualmente somos cerca de 13.000 trabajadores y trabajadoras en la plataforma. Desde su constitución se redactaron cuatro puntos constitutivos. El primero era que el Gobierno nos descatalogará como personal de bajo riesgo, es decir, que nos sacaran de la
dichosa tabla. Esto sucedió hace poco, el 7 de octubre aunque la carta fue enviada el 11 de mayo.
El segundo punto, que creemos que hace al futuro de nuestra profesión, es que el Servicio de Salud actualice las funciones que ahora están definidas en una legislación de 1971. Cuando las nuevas funciones estén reconocidas queremos que se cree un grado medio para poder trabajar como celador, ya que actualmente solo se necesita el graduado escolar. Esto lo que hace es que un chaval de 18 años que esté en listas, le puedan llamar y a la semana siguiente sin ningún tipo de formación ni conocimiento esté en una UCI. Imagina esto y el peligro para el paciente sin saber que es una PCR, un catéter, como mover a un paciente intubado, sin conocer las posiciones de los pacientes en quirófano, etc etc., y esto lleva pasando 50 años. Para mi es el más importante y es el que vamos a empezar a luchar ahora.
Obviamente que no esté esta información les interesa. ¿Por qué no se ha hecho hasta el momento? Pues bueno, como se hace con cualquier colectivo, cuanto más precarizado lo tienes, más sometido lo tienes. Yo no tengo fuerza para exigir demandas y eso está llevando a lo que está sucediendo en algunas CCAA, como Madrid y Galicia, donde el servicio de celador se ha externalizado.
Y esto es peor aún, porque el trabajador o trabajador no está en una lista de funcionarios que va entrando y saliendo y poco a poco va aprendiendo y bueno, después de muchos fallos acabará supliendo la carencia educativa con la experiencia. Pero claro, si esto se traspasa a una externalización, con gente que entra a trabajar con contratos de 6 meses, o al año lo despido, etc. Además de la desmotivación del propio personal con todo ese trabajo que realiza por 800 euros al mes, gente que está tocando a pacientes. Y esto mientras se llevan millonadas por la concesión.
El tercer punto es equiparación salarial. Claro, tenemos 17 Servicios de Salud y cada uno tiene sus competencias y cada uno tiene su tabla salarial. Entonces obviamente como me comentan otros compañeros y compañeras de otros Servicios de Salud la diferencia es bastante. Es complicado, pero como plataforma y por solidaridad con los compañeros y compañeras, lo tenemos como demanda.
El cuarto punto es que queremos homogeneizar los criterios para avanzar en la carrera profesional, que es básicamente que se reconozca la antigüedad y que esto reporte mejores condiciones. Actualmente, igual que en el punto 3, cada uno de los Servicios de Salud tiene sus criterios y lo que queremos es equipararlos.
ID: El caso de Madrid está hoy en todos los medios. Ayuso vuelve a confinar barrios del sur, los barrios de clase trabajadora con el apoyo del Gobierno central en cuanto a aportación de cuerpos de policía y Ejército. Medida impuesta a pesar de ver esas famosas imágenes del transporte público lleno. La propia presidenta también comentó que en esos barrios la immigración, producto de su cultura, favorece al contagio. ¿Qué opinión te dan esas medidas y como profesional de la sanidad crees que tienen algún sentido?
A: La presidenta confinó unos barrios con un perfil de voto un poco más de izquierda, un voto más de su oposición dejando barrios de su ideología sin confinar. No tiene sentido cerrar Vallecas y no poner rastreadores o no poner más vagones de metro o más buses para que no haya tanta gente en el transporte público. Yo lo veo una decisión electoralista o “yo no confino a los míos y confinó a los del otro bando” y fuerzo al Gobierno central para que quede como el malo de esa película, le fuerzo que tenga que decretar un estado de alarma o un confinamiento total para que yo ya le pueda vender a mi votante que no le he confinado yo. Ya lo último es de chiste, también pienso que como toman esas medidas que son un fallo jurídico anticonstitucionales porque tu sin estado de alarma no puedes restringir la circulación. Lo primero es la salud de la ciudadanía pero como estamos en tanta fracción política y juego político. |