El Gobierno del PSOE y Unidas Podemos ha decretado un nuevo Estado de Alarma que incluye el toque de queda nocturno de 23 a 6, restricciones a las reuniones y los desplazamientos en todo el Estado, salvo en las Islas Canarias. Y anuncia que el Estado de Alarma se mantendrá durante seis meses.
Además, algunos Gobiernos autonómicos suman otras medidas en la misma línea. Catalunya, por ejemplo, amplia el toque de queda desde las 22 de la noche y estudia decretar el confinamiento durante el fin de semana; Madrid mantiene el confinamiento de clase aplicado a algunos de los barrios más pobres de la capital.
Estas medidas contrastan con el inexistente refuerzo de los servicios públicos. La falta de inversión en servicios sanitarios, sistemas de rastreadores, test masivos o en transporte de los gobiernos central y autonómicos está llevando a una situación que nos acerca a la crisis sanitaria que vivimos en la pasada primavera.
Vemos como las únicas medidas adoptadas por los distintos gobiernos ponen el foco en la responsabilidad individual y están dirigidas a criminalizar la pobreza y la vida de los trabajadorxs. Todo menos poner en cuestionamiento el modelo laboral y de precariedad en nuestras vidas que nos impone el capitalismo.
En estos meses de pandemia hemos visto además como las empresas recibían millones de euros, algo que contrasta con las escasas ayudas dirigidas a las y los trabajadores. Los empresarios despiden y hacen ERTEs. Ellos no pagan, es la Administración Pública la que les está financiando la crisis para que no dejen de percibir sus cuantiosos beneficios. Al mismo tiempo, miles de trabajadorxs no hemos cobrado los ERTEs o apenas cobramos un porcentaje de nuestro salario base, otros muchos estamos en el paro y sin perspectivas de futuro.
Y ahora quieren hacernos responsables de una situación a la que hemos llegado por falta de inversión en servicios públicos y en políticas sociales. Quieren hacernos culpables por tener que usar el transporte público para ir a trabajar o querer salir protegidos al parque un rato después de una semana de trabajo agotador.
Está claro que la Covid para la clase trabajadora es menos salud, más precariedad y explotación. Por ello desde la Red de Precarixs denunciamos que, a 8 meses del inicio de la pandemia, las políticas de restricción a la movilidad, militarización del espacio público y criminalización de la juventud del Gobierno de Sánchez y Pablo Iglesias, así como las políticas de confinamiento clasistas y racistas de gobiernos como el de la Comunidad de Madrid, son medidas autoritarias resultado de una gestión completamente irracional de la crisis, favorable únicamente a los intereses de los capitalistas.
Exigimos que se lleve a cabo el único plan de emergencia que necesitamos las y los trabajadores, la juventud y los sectores populares: refuerzo de la atención primaria; contratación masiva de sanitarios y reincorporación de todos los que fueron despedidos en la primavera; contratación y capacitación a escala industrial de rastreadores; intervención de la sanidad privada, los grandes laboratorios y farmacéuticas para poner todos sus recursos al servicio de la lucha contra la Covid; prohibición de despidos; renta de emergencia y licencias pagas para todas las personas que lo necesiten; refuerzo del transporte público; prohibición de los desahucios y moratoria de los alquileres; terminar con la precariedad y derogación de las dos reformas laborales; aulas seguras e inversión en educación; impuestos extraordinarios a las grandes fortunas; expropiación de la fortuna de la Familia Real; fuera la policía y el ejército de nuestros barrios.
Por este programa lucha al Red de Precarixs. ¡Súmate y organízate! |