La ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, María Eugenia Bielsa, sostuvo en Radio Rivadavia que antes de desalojar violentamente en estos meses “se hizo todo lo que se pudo”. Miente.
Hace instantes, mientras jóvenes y familias siguen resistiendo la brutal represión desatada por Berni para desalojar Guernica, la ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, María Eugenia Bielsa, dijo que en estos meses “se hizo todo lo que se pudo”.
En diálogo con Radio Rivadavia, dijo que “se empezó a dialogar desde el primer momento”. “Eso te lo aseguro”, enfatizó al ser consultada por el periodista que responsabilizaba al Gobierno “porque se le escapó la tortuga”, dado que la toma de Guernica “está hace 4 meses”.
La ministra miente, dado que las familias pasaron lo más duro del invierno acampando y soportando condiciones de vida inhumanas, sin que absolutamente ningún funcionario del Gobierno se acercara. Ese desprecio total por su lucha y sus necesidades, fue lo que motivó el rotundo rechazo de las familias cuando el ministro de Desarrollo Social, Andrés Larroque, se dignó a acercarse al predio después de más de dos meses.
Como demuestran los videos publicados entonces por La Izquierda Diario, el funcionario llegó a Guernica luego de que un temporal dejara al desnudo las deplorables condiciones de vida en que se encontraban las familias. La escena de las casillas de cartón y nylon, siendo voladas por el viento y el barrial alrededor y dentro, se repitió más de una vez en estos cuatro meses.
Pero de esto que las familias denunciaron parece no haber quedado registro en la memoria del periodista Fernando Carnotta. La ministra continuó con su mentira, diciendo que desde el primer momento el Gobierno negoció con los representantes de las familias. Y no solo eso, sino que sumó más mentiras a la campaña de estigmatización de quienes luchan por vivienda, para justificar la represión.
“No quiero descartar la necesidad, claramente hay una necesidad, también están aquellas organizaciones políticas que acompañan y que probablemente son más duras y que como no están en la gestión no terminan de comprender cuál es el tiempo y la posibilidad de la gestión . Y por otro lado también hay un circuito de acciones de quienes se aprovechan, que impulsan a tomar un terreno para después vendérselo a otra familia, es un circuito que todos conocemos, que todos los argentinos y las argentinas conocemos. Se empezó a negociar desde el primer momento. Se empezó a acordar solución, traslados, familias que quedaban registradas o parejas o mujeres que volvían a la casa de sus padres con materiales para poder construir, pero la realidad es que se ha hecho todo para intentar buscar una salida”.
Por último, para cerrar justificando con más argumentos falsos la represión contra las familias más necesitadas, Bielsa sostuvo que “no se avala la ocupación, esto es tierra privada, habrá que demostrar si los títulos efectivamente son válidos o no válidos pero igual, aunque fuese tierra fiscal…”. No solo da por sentado que son tierras privadas, cuando ningún propietario ha podido presentar un solo título de propiedad, sino que admite que se reprima en cualquier circunstancia, aunque fueran terrenos públicos.