“Seño, seño, seño, seño… la palabra hoy más oída y también la más preciada.” “Los chicos tenían ganas de jugar y escribir, y vinieron más chiquitos de los que estaban anotados.” “¡Son tan hermosos, querían escribir, dibujar, todo, todo!”
Estos son algunos de los comentarios de las docentes que se acercaron el día domingo al Barrio Los Ceibos a la posta educativa junto a estudiantes terciarios y de la Universidad de La Matanza. Esta Posta Educativa cuenta con el apoyo tanto del Centro de Estudiantes del profesorado 88, como también del Suteba La Matanza según lo votado en las asambleas de ambos organismos.
Lxs niñxs jugaron a los títeres y al bowling, escucharon cuentos, escribieron y dibujaron. También participaron del taller de matemática, e hicieron muchas actividades más. En el mismo momento, continuó el relevamiento educativo de los 600 niñxs del barrio.
“Mi hija está re contenta con el cururu” dijo otra docente que participó con su hija, luego del taller de cuentos. Cururu es sapo en guaraní.
“¡Soy una nieve! - dice una niña con un títere en su dedito.
Muy bien, ¿y esa cómo se llama? ¿la que tiene el pelo largo?
¡Es una princesa!
¿Y de qué cuento es la que tiene pelo muy largo y rubio?”
Este tipo de escenas se replicaron en el barrio durante toda la tarde. Se vieron a lxs chicxs reírse a carcajadas mientras aprendían la suma y la división, como también a escribir sus nombres y a contar cuentos de formas distintas.
Además, en la jornada se hizo entrega de las donaciones realizadas por trabajadores de Techint, Siderca, Municipales de Campana y otros, como también estudiantes y docentes de distintos institutos de la zona norte.
“Mirá sus dibujos, y no todos están alfabetizados porque pedían ayuda para escribir sus nombres. Fue una muy linda tarde”, dijo otra docente.
Aunque funcionarios del gobierno lo hayan dicho por todos los medios, sin vivienda digna no hay posibilidad de que haya continuidad pedagógica. Por eso, desde que las familias se organizan, y en la Comisión de Mujeres se planteó la necesidad, se puso en pie la Posta Educativa con la participación de estudiantes de En Clave Roja y No Pasarán, junto a La Marrón del Suteba La Matanza. Mientras, siguen exigiendo una respuesta al problema habitacional al gobierno de Kicillof y Espinoza.
“Techo para vivir” dicen las banderas del barrio, en esta semana clave, después de la cruda represión en Guernica para desalojar a 1400 familias quienes desde el jueves están durmiendo en la calle, mientras el gobernador niega la represión de Berni y se victimiza diciendo que “la izquierda” tiraba gases contra las familias. Insólito.
La situación habitacional en el país cuenta con el 24 % de las personas habitando en viviendas precarias, sin contemplar la masa de gente que ni siquiera tiene acceso a la vivienda. Es una verdadera crisis, ya que de parte del Estado no dan más respuestas que ataques, demonización y represión para los que menos tienen. En Guernica, el Gobierno demostró que son más importantes los negocios inmobiliarios, que la vida de las mujeres, niñxs y jóvenes a quienes desalojaron con saña.
En El Barrio Los Ceibos no están solos: los docentes y estudiantes que se acercaron a llevar solidaridad y colaborar con la Posta Educativa,los sectores combativos y la izquierda saben que hoy se vuelve más que importante fortalecer esos espacios junto a las familias, porque la vivienda y es un derecho, no un delito, y para que esos niñxs puedan seguir jugando y aprendiendo, pero en una casita. Su casita.
Todos los docentes y estudiantes que se quieran acercar a sumar solidaridad quedan invitados.
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