El pasado viernes 6 de noviembre, la agrupación de familiares y amigos de las y los Presos Políticos de la Rebelión, convocó a una concentración en Plaza Dignidad. La manifestación tuvo que enfrentar el desproporcionado asedio policial y posteriormente un violento desalojo que dejo como consecuencia una nueva víctima de trauma ocular.
Solo hace dos semanas atrás Tania Carter, docente y voluntaria en las Brigadas de Salud, fue atacada mientras se encontraba ejerciendo la labor voluntaria de atender a los múltiples heridos que deja el actuar de criminal de carabineros. “Ahí nos rodean, nos insultan y me tiran el gas pimienta directo al rostro. Sólo caminé unos metros y perdí el conocimiento. Desperté en la Posta Central. Una muestra clara no solo de una violación sistemática de los derechos humanos donde la agresión reiterada y generalizada a las brigadas de salud pueden considerarse internacionalmente como crímenes de lesa humanidad, sino que también de una intencionalidad clara de castigar físicamente a quienes protestan contra el régimen.
Esto se produce bajo el incondicional respaldo del gobierno, que mantiene en completa impunidad las violaciones a los Derechos Humanos. Expresado claramente por el actual ministro del interior Rodrigo Delgado, que a días de asumir el cargo refuerza la clara línea política del gobierno de Piñera que mantiene a miles de jóvenes privados de libertad, en juicios sin pruebas y arriesgando consecuencias desproporcionadas.
El gobierno de Piñera y el régimen de conjunto buscan criminalizar la protesta manipulando la opinión pública al pautear a los medios de comunicación para reproducir un único discurso que justifique el uso desmedido de fuerza por parte de la policía contra la población civil que se moviliza.
Después de la victoria del "apruebo" el gobierno busca consolidar el desvío que significo el acuerdo por la paz. Utilizando una serie de artimañas para negarle a los sectores populares, a las y los trabajadores y a la juventud el protagonismo en los cambios sociales urgentes que se necesitan.
Es necesario movilizar nuestras fuerzas para ponerle fin a la represión que se sigue manteniendo a un año del estallido social del 18 de octubre y que se seguirá mientras Piñera siga gobernando. Por eso es importante levantar una huelga general por el fin a la represión, que se vaya Piñera y por la libertad a los presos políticos de la rebelión. |