El congreso del estado de Chihuahua se plegó a las demandas del gobernador Javier Corral Jurado, aprobando con carácter de decreto la Ley que impone/regula “el uso obligatorio de cubrebocas”, como una medida recaudatoria, más que de contención a la Pandemia.
¡Con sanciones económicas de hasta $2,215.00 para establecimientos y $442.00 a las personas, así como cárcel por 12 horas!
Con el voto panista favorable de 22 curules contra 7 de la bancada del Morena, 1 abstención y la ausencias de 3 diputados, Javier Corral Jurado, impuso a través de la candidata de la Comisión de Salud del Congreso local, la Ley para el uso obligatorio del cubrebocas en el estado de Chihuahua.
Lo que desde varios editorialistas y expertos en la materia llaman como, una propuesta llena de “vacíos legales que pueden generar violaciones humanas en contra de los ciudadanos, como es el caso de extorsiones, detenciones arbitrarias y uso excesivo de la fuerza pública”, en redes sociales, comenzaron los memes y burlas contra lo que denominan una ley recaudatoria, que motiva la extorsión y que deja en la indefensión a la población frente a los cuerpos policiacos, además de que finalmente raya en la inconstitucionalidad.
Dichas sanciones, se explicó “no podrán ser impuestas sin que previamente haya amonestación al infractor”, lo anterior, más allá de lo risorio, resulta muy preocupante en una ciudad y estado, en donde, se ha caracterizado por la nula o inexistente defensa y respeto de los derechos humanos, salvo los discursos institucionales y, en ocasionales muy específicas, los llamados voluntariosos de las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC).
Recordemos que, durante las administraciones actuales, han existido más de 3 casos de personas fallecidas por tortura, de parte de los elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), trascendiendo 1 de ellos, acaecido en las propias instalaciones policiacas.
Sin ir tan lejos, “Días atrás un joven panadero que salió a trabajar aproximadamente a las 4 AM rumbo a su trabajo, fue interceptado por policías municipales de la capital del estado, quienes lo detuvieron porque el joven no portaba cubrebocas en su automóvil y debido a que éste se negó a colocárselo, fue bajado de su automóvil y llevado a una comandancia donde fue golpeado por los agentes”.
De la misma manera que, desde la iniciativa Corralista se insiste en que “lo recaudado será utilizado para la realización de un fondo destinado al apoyo y compra de insumos para el sector salud”, su discurso contrasta con la realidad y el estatus local que lleva la Pandemia Covid-19, el colapso del sistema de salud estatal y las recientes protestas de las y los trabajadores de la salud, quienes reclaman la ausencia de insumos, medicamentos y equipo especial, además de la denuncia del prometido “Bono Covid-19”.
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Según datos de la Secretaría de Hacienda el Estado, algunos números contrastan con los discursos de austeridad de Javier Corral Jurado, por ejemplo, el gobierno de Chihuahua gastó 132 mdp en sus viajes por la república, solo en lo que va del año.
De igual forma, de los $3 mil 465 millones de pesos que el estado destinó para el Plan Emergente Covid-19, hasta finales de septiembre, solo se habían ejercido 850 millones de pesos, resultando un subejercicio de más de 2 mil millones de pesos. Lo que en otras palabras significa decir que, el gobierno estatal no entregó ni el 25 % de lo prometido.
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La aplicación de la Ley cubrebocas se basa en sanciones persecutorias, sancionadoras y violatorias a la Constitución, además de por no ser proporcionales, porque pretende eximir de responsabilidad al estado y empresas, quienes están obligados a dar los aditamentos básicos para el cuidado de la salud de sus gobernados y/o clientes. Una Ley intimidatoria y que pretende infundir el miedo en la población.
Desde el Movimiento de las y los Trabajadores Socialistas planteamos que es necesario la creación de gran frente único obrero, que logre unificar a sindicalizados y no sindicalizados, empleados y desempleados, a basificados con sus compañeros precarizados que no tienen ningún derecho. Con sus organizaciones sindicales al frente, que se movilice en contra de los ataques de empresarios, los gobiernos y sus partidos de derecha.
Es necesario recuperar a los sindicatos de las manos de la burocracia sindical, para transformarlos en herramientas para la lucha contra la crisis y los capitalistas, con independencia del estado, de los gobiernos y sus partidos patronales. Es desde esta perspectiva que desde principios de mayo impulsamos el Movimiento Nacional contra la Precarización y los Despidos.
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