Trabajadores y trabajadoras del hospital Natalio Burd, realizaron esta actividad con la finalidad de alzar la voz ante la negativa del gobierno a cumplir con los acuerdos salariales y exigir el cese de las persecuciones.
La actividad fue votada en la última asamblea que también rechazó la conciliación obligatoria impuesta por el gobierno el pasado martes 10 de noviembre, día en el que los y las estatales iban a comenzar un paro por 48 horas que quedó truncado después de haber acatado.
A pesar del intenso calor se hicieron presentes, un nutrido grupo de personas trabajadoras de la salud del hospital de Centenario, del Castro Rendón, del hospital Bouquet Roldán y también estuvieron presentes trabajadores del EPAS (Ente Provincial de Aguas y Saneamiento).
Todos los presentes tenían en común, la exigencia del pago atrasado del aumento de sueldo acordado en el mes de febrero acorde al índice que marca el IPC, el no cumplimiento de la entrega o pago de la ropa de trabajo. Pero por sobre todas las cosas el reclamo estuvo dirigido a la conducción sindical de ATE (Asociación de
Trabajadores del Estado), que no democratiza los espacios de discusión en ninguna repartición estatal y realiza plenarios de delegados sin asambleas que definan que plan de lucha de cara a estos reclamos, quieren llevar adelante los y las estatales de Neuquén.
La solidaridad de la comunidad se hizo presente en los bocinazos de los autos que circulaban por la Avenida Libertador de Centenario. Otro punto fuerte del reclamo fue el pedido de nulidad de los sumarios a los enfermeros del hospital que fueron apartados de sus cargos por haber organizado cronogramas para el funcionamiento del sector durante la pandemia.
Roger Obelar uno de los enfermeros sumariado denunció que lo mandaron a trabajar a 15 kilometros del hospital donde desempeñaba sus funciones y que si bien percibieron sus salarios, y las autoridades se comprometieron a la reinserción laboral, hasta el día de la fecha solamente él, comenzó a trabajar y no así sus dos compañeras.