Era una incógnita futbolística este Racing de Beccacece que atravesaba una coyuntura muy mala en el campeonato local, la Copa de la Liga Profesional, donde perdió todo y está sin puntos afuera de la zona campeonato, y también desde lo institucional con la renuncia de Diego Milito como Mánager y los chispazos con el presidente Víctor Blanco. Sin embargo, parece estar enfocado en la Copa Libertadores: entregó una buena imagen en su desafío ante Flamengo -el campeón vigente de la máxima competencia continental- y debió quedarse con el triunfo, pero una injusta y lamentable interpretación del VAR lo dejó con este empate con sabor a poco y que lo obliga a buscar en la revancha en Río de Janeiro.
Se ilusionaron en Avellaneda cuando llegó el gol a los 12 minutos luego de una gran escalada por la punta derecha del uruguayo Fabricio Domínguez que se escapó de la marca de Felipe Luiz bajo la lluvia torrencial y mandó el centro que aprovechó Fértoli colando la pelota por el palo del arquero Alves. Era el 1 a 0 y el anuncio de un partidazo.
Pero la ilusión se desinfló enseguida: en la jugada siguiente, 2 minutos después, Racing perdió la pelota y desde el fondo salieron rápido para Bruno Henrique que guapeó por la izquierda, ganó y envió un centro con el empeine que debería guardarse en el Museo de Louvre: Gabriel Gabigol apenas tuvo que empujar para el 1-1.
Aunque Flamengo tuvo más posesión de la pelota, Racing tuvo un poco más de audacia y trató de sacarle el jugo a la debilidad defensiva de los brasileños: la principal carta fue el chileno Mena por izquierda, que le ganó siempre a René. Desde ese sector vino la jugada de la “polémica”: Mena escapó, mandó centro para cabezazo frontal de Licha López y era el 2-1 inobjetable para Racing. Pero el VAR objetó: en la revisión de la jugada determinaron que Mena había hecho una falta inexistente. Por eso ponemos polémica entre comillas: si encima los asistentes tienen la facilidad de contar con varias tomas para observar desde sus monitores, es inentendible que hayan visto una falta en esa jugada en la que Mena ganó limpio.
Pero luego el VAR actuó bien en dos ocasiones en las que intervino aplicando justicia para la Academia: anuló un gol de Vitinho en posición adelantada y determinó la expulsión de Thuler por un planchazo a Licha.
Se le complican un poco los planes a Racing, un gol del visitante siempre es un problema, pero desde que en el sorteo salió la bolilla de Flamengo siempre tuvo claro que será una serie difícil. Ahora le toca ir a todo o nada en Río de Janeiro, donde puede salvar el año y trepar a cuartos de final o prácticamente cerrar el 2020 si queda en el camino. Se juega mucho la Academia y desde ahora pone toda su tensión en el encuentro del martes próximo. | 
