El 28 de noviembre de 1911 el Gral. Emiliano Zapata proclamó el Plan de Ayala para reivindicar los derechos de los campesinos con su lema: “Reforma, libertad, justicia y ley”.
Un 28 de noviembre de 2020, a más de 100 años de distancia, los campesinos de Morelos, en especial los de Ayala cuna del zapatismo, se tienen que organizar como pueblo trabajador para defender el agua que necesitan para sus tierras y que será utilizada para el funcionamiento de la termoeléctrica de ciclo combinado.
Los campesinos se sienten traicionados porque el presidente de la república que, en su visita al Estado de Morelos durante su campaña electoral, prometió no poner en funcionamiento la termoeléctrica, motivo por el cual depositaron su confianza votando a su favor.
“El señor presidente nos mintió, nos traicionó” reclamaban algunos pobladores el día en que se desalojó el plantón de San Pedro por la guardia nacional.
Ojalá sean escuchados en sus justos reclamos, de lo contrario Obrador pasará a la historia como un moderno Guajardo.
¡AGUA SÍ, TERMO NO!
*Maestra de secundaria de Ayala
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