El pasado viernes, jóvenes secundarios se concentraron en el Obelisco, convocados contra la homofobia, ante la repercusión que tuvo en redes sociales el suicidio de la adolescente Leonela Gómez y las declaraciones de su padre quien adjudicó a su orientación sexual la decisión de quitarse la vida.

En el marco de la convocatoria del 3 de junio, bajo la consigna #NiUnaMenos, el suicidio de la adolescente Leonela Gómez tuvo gran repercusión y jóvenes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y el conurbano bonaerense se concentraron, junto con agrupaciones de izquierda, en el Obelisco, para reclamar el fin de la homolesbotransfobia.

A partir del debate social que se generó con la sanción de las leyes de matrimonio igualitario e identidad de género, podría estimarse que las y los adolescentes viven su sexualidad con mayor libertad, especialmente en los grandes centros urbanos. Sin embargo, estos mismos jóvenes señalan los límites que tiene esa libertad y denuncian la persistencia de la homofobia. Belén, una de las convocantes de la movilización declaró a La Izquierda Diario: "Organizamos esta juntada para cambiarle el pensamiento a las personas. Hay personas que pueden matarse y no queremos que llegue a esto."

El reclamo se realizó contra todos los tipos de discriminación que sufren las personas que eligen una sexualidad o identidad de género que no se ajuste a la norma heterosexual. "Te pueden echar de tu trabajo por ser travesti o gay", decía Belén al respecto. A su vez denunció la falta de implementación de la Ley de Educación Sexual Integral en la mayoría de las escuelas a nivel nacional: "Pedimos que el gobierno también se haga cargo, que den educación sexual en los colegios, porque no hay".