Las protestas son vistas como una amenaza a la estabilidad de los planes de Estados Unidos en la región. Por ello la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) lanzó una propuesta que reprueba toda “ruptura del orden constitucional en Guatemala” y propone que nuevo secretario general “modernice” al país.
Desde Argentina el canciller Héctor Timerman ha propuesto una declaración que apoye la salida electoral el próximo 6 de septiembre y así evitar que esta crisis se salga de las manos y se convierta en un triunfo más para el movimiento democrático de miles, que parece imparable.
La OEA ha llamado a todos los actores políticos, económicos y sociales de Guatemala a ejercer “un papel constructivo y equilibrado para fortalecer la democracia”.
El texto ha sido aprobado y hoy es un llamado formal lanzado en inglés y en español para que el mundo sepa que esta institución opta por fortalecer la salida electoral y debilitar las peticiones en las calles de que Otto Pérez se vaya de una vez.
Serán cinco diputados quienes integren una comisión encargada de investigar y definir si se le retirará o no la inmunidad al presidente Otto Pérez Molina, a quien un diputado acusa de actos de corrupción.
¿Qué es la OEA para intervenir en esta crisis?
La OEA está formada por 35 países, recientemente agregada Cuba, pues hasta hace unos años Estados Unidos impidió su ingreso. Estados Unidos tiene importancia en la toma de decisión interna de este organismo.
Hoy escuchar a la OEA opinar de la crisis en Guatemala, es sin duda una presión política de Estados Unidos para intervenir en el conflicto.
Ha demostrado ser un instrumento de Estados Unidos que ratifica sus necesidades en alianza con otros países, para toda la región del continente.
Por ejemplo en 2009, la OEA fue denunciada por organizaciones sociales en
Honduras y latinoamericanas, por su sospechosa dubitación en la tardía reacción ante el peligro de golpe de estado que se impuso en este país y sus recomendaciones posteriores fueron totalmente ignoradas por los golpistas. En el marco de denuncias de apoyo de congresistas republicanos de Estados Unidos al golpe militar en este país.
Las protestas independientes preocupan a la clase política corrupta
Otra enorme manifestación de decenas de miles de indignados, se realizó este sábado en las calles de Guatemala y exigió la caída del presidente Otto Pérez, vinculado a un gobierno plagado de escándalos de corrupción y tráfico de influencias.
Desde que iniciaron las protestas han alcanzado un triunfo tras otro, aunque convertidos en “renuncias aceleradas por el gobierno en un intento por que no “se vayan todos” de tajo y recuperar el prestigio perdido por el régimen.
Existe una posibilidad de que caiga Otto Pérez, producto de la radicalización del movimiento, como comenzamos a ver con los bloqueos a las entradas de la ciudad y que el mismo comience a adoptar medidas políticas que fortalecieran a los trabajadores, como la huelga general.
Pero esto es visto como un peligro para los intereses de los políticos corruptos, el ejército y los empresarios y frena los planes de explotación de los recursos naturales en el país más rico de Centroamérica.
Contra las salidas propuestas de la OEA, este movimiento puede ir por más y debe confiar en sus propias fuerzas para buscar una salida independiente a la actual crisis política.
Contra toda desviación electoral que fortalezca al régimen corrupto y criminal y por el surgimiento de verdaderas representaciones de los trabajadores en las calles, con una Asamblea Nacional de Lucha que discuta los principales problemas que enfrentan los trabajadores, campesinos y la juventud. | 
